EL ARTISTA DE LA HUMANIDAD - Misión Vida para las Naciones

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MENSAJES DEL CIELO

EL ARTISTA DE LA HUMANIDAD

Nos estamos aproximando a la Navidad y esto le recuerda al mundo que Cristo cumple su palabra; dos mil años antes de la venida de Cristo se profetizó que iba a nacer en Belén, que sería nazareno, nacería de una virgen, sería colgado de un madero. Hay cientos de profecías que durante dos mil años  anunciaban la venida de Jesucristo al planeta y ahora llevamos dos mil años nuevamente profetizando que Cristo vuelve. Lo que la razón no puede aceptar, la Biblia lo asegura, veremos quien triunfará, la Biblia o la razón del hombre.

Leemos en Génesis 1:1 y 2: 1En el principio creó Dios los cielos y la tierra. 2Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas”.

Cuando dice que las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, significa que satanás y sus demonios, el reino demoníaco estaba sobre la faz del abismo y el Espíritu estaba sobre la faz de las aguas. Dijo Dios: “sea la luz”; la palabra luz en la Biblia hace referencia a la verdad, por eso Jesús señaló: “Yo soy el camino, la verdad y la vida” y “Yo soy la luz del mundo”. ¡Donde está la verdad se disipa el engaño! El problema más grave que tiene el mundo es la manera en que ve las cosas, es que está todo oscuro y la oscuridad está sobre la faz del abismo. Jesús afirmó que satanás es el príncipe de este siglo, o sea, de este tiempo. Pero Jesús es el príncipe de todos los tiempos: ¡Por sobre este tiempo está la eternidad y Jesucristo es el Señor desde la eternidad y hasta la eternidad!

El reino de las tinieblas opera engañando a través de la oscuridad, y cuando hay oscuridad no podemos ver bien. La Biblia señala que Jacob se casó de noche, estaba oscuro, y le pusieron en su tienda una mujer que no era la que él amaba, pero como estaba oscuro él la tomó por mujer. Al otro día como ya había luz la miró bien y pensó: “¡Me han vendido gato por liebre!” ¡Pero había estado toda la noche creyendo que era la que él quería! La mujer, por supuesto, toda la noche muda porque si hablaba la quedaba. ¡Cuando hay oscuridad hay mucha confusión! ¡El mundo está ciego y no entiende!

EL MUNDO ESTÁ EN OSCURIDAD

Jesús habló de esto refiriéndose a algunos religiosos de su época: “Ciegos, guías de ciegos”. El mundo está siendo guiado por la oscuridad y por las tinieblas, por eso hay hombres que se casan y al poco tiempo dicen: “Me equivoqué, no era ésta”. La prueba y luego quiere probar otra, como están ciegos van tanteando, usando el sistema Braile, y después que tocaron dicen: “No, tampoco”… y entonces prueban con otra. ¡El mundo está en tinieblas!

Ya no sabemos si creerle a Bush, a Obama, a Cristina, menos mal que nuestro presidente, “El Pepe” nos cae simpático, por lo menos algunos chistes se manda, pero tampoco sabemos a dónde vamos. El mundo está en tinieblas, pero Jesús dijo: “Yo soy la luz del mundo”. Dios opera a través de la iluminación que trae la verdad, Él es Dios de la verdad. Jesús nos prometió que nos enviaría su Espíritu Santo y le llamó “el Espíritu de verdad el cual nos guiará a toda verdad”. El problema más serio no es que el mundo está en oscuridad sino que hay cristianos que están en oscuridad. Si miramos la cara de algunos cristianos es cómo que tuviera en su frente un signo de pregunta; le preguntas para qué vive y te responden: “No sé”. ¿Y cuál es la voluntad de Dios para tu vida? “No sé”. ¿Qué dones espirituales tienes? ¡No tienen nada claro! ¡Necesitan la luz de la verdad! ¡Necesitan la iluminación del espíritu de Dios! Hay cristianos que también elijen la esposa por el método Braile; que el mundo haga eso vaya y pase pero que suceda eso en la iglesia, ¡es terrible!

Sabemos que satanás quiso hacer una rebelión en el cielo, que arrastró un tercio de las estrellas consigo, es decir, a los ángeles del cielo que se trasformaron en demonios del infierno. Satanás era un querubín que tenía acceso al trono de Dios, y hasta el día de hoy tiene acceso porque es nuestro acusador, es él quien te acusa delante de Dios de día y de noche, por eso Jesús está sentado a la diestra del Padre intercediendo por nosotros de día y de noche porque es nuestro abogado defensor. ¡Él murió en la cruz del calvario por nosotros! ¡Derramó su sangre por nosotros! ¡Jesús vela por nosotros! Él, abriendo sus brazos dice: ¡Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen!

Estaban crucificando al Señor en el gólgota y allí estaban los religiosos escupiéndolo y mofándose diciendo: “Si eres el Hijo de Dios bájate de ahí”; pero la misión de Jesús era quedarse allí hasta derramar la última gota de sangre para salvar a todo aquel que en Él cree.

Este planeta, este tiempo, este orden histórico que estamos viviendo, la historia de la humanidad, desde que apareció el hombre hasta que se termine, es un suspiro en la eternidad. La historia del hombre es un paréntesis en la eternidad; en este paréntesis hay una confrontación de poderes de maldad contra poderes espirituales de Dios, y no es en todos lados, porque Dios no le permitió a satanás establecer su trono en el cielo. El diablo vino y engañó a Adán y a Eva para que estos sean confundidos y desconozcan la verdad; y al desconocerla y creer la mentira de satanás quedaron bajo su autoridad y su poder. ¡Así sucedieron las cosas! Fueron desobedientes y rebeldes contaminando su carne y su descendencia. Por un hombre entró el pecado al mundo pero por un hombre también entró el perdón, la salvación y la vida eterna.

En este paréntesis, en este orden de cosas, en este siglo, los poderes de las tinieblas en el planeta Tierra están luchando contra las huestes de Dios. Y Dios quiere establecer su reino. ¿Quién ganará? Ya sabemos por la fe que Jesucristo ganará. ¡Él es el Rey de reyes y Señor de señores! ¡Venció la muerte! El poder de satanás se manifestó en la muerte, él era el dueño de la muerte pero Cristo le arrebató las llaves que estaban en su poder y resucitó. Por eso Jesús nos enseñó a orar: “Venga a nosotros tu reino y hágase tu voluntad como en el cielo así también en la tierra” ¡Dios está estableciendo su reino en el planeta Tierra! Dios está interviniendo, Él nunca decidió entregarle el asunto a satanás, porque esta pelotita que es el planeta Tierra le pertenece a Dios. ¡Él es el dueño de la pelota! ¡Mira si satanás va a arrebatarle la pelota a Dios!

Entonces, las fuerzas de Dios luchan por imponer la verdad y las fuerzas de satanás luchan por engañar al hombre haciéndole creer cosas que no son; esta guerra no podrá ser ganada con fuerza humana, no es una guerra que pueda ganar el hombre por su inteligencia o por haber juntado mucho oro o por tener un ejército muy grande, esta es una guerra espiritual. El apóstol Pablo dijo: “Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes”. (Efesios 6:12) ¡Nosotros estamos viviendo en una guerra espiritual y hay cristianos que ni están enterados!

LOS VERDADEROS CRISTIANOS ESTÁN EN GUERRA

Recientemente me llamaron por teléfono desde la ciudad de Salto y me dijeron que una persona que se entregó a Cristo y formaba parte de un grupo satánico les declaró que me han hecho trabajos de brujería para que yo muera en un accidente. ¡Yo no les he hecho nada a esas personas! ¡Ellos me odian gratis! También, un chico que participó de un encuentro en Monte Beraca me dijo: “Pastor, quiero que me perdone porque yo lo odiaba tanto y hablé tan mal de usted.” Yo le pregunto: “¿Y vos que sabías de mi?” “Nada”, me responde. ¡Satanás se encarga de poner gente que te odie!

¿Tú tienes guerra espiritual o no? Veo tan tranquilos a algunos creyentes como que si no tuvieran guerra espiritual. Si tú no quieres tener problemas entonces no te consagres. ¿Has visto cómo lo odiaron a Jesús y cómo tramaron su muerte? Habían decidido matarlo desde el momento en que resucitó a Lázaro; por esta causa muchos  comenzaron a creer en Jesús, pero se reunieron los principales de esa época y dijeron: “¡La gente se va detrás de él! Si no lo paramos el mundo entero se irá detrás de él.” Desde ese momento se juramentaron que lo iban a matar. ¿Qué mal hizo Jesús? ¡Sólo resucitó un muerto! ¡Jesús hizo la obra de Dios y esto valió que algunos se juramentaran para matarlo!

Tú no puedes ser cristiano si no estás lleno del Espíritu Santo, si Él no te está llenando vas a fracasar, si no te alumbra vas a ser engañado como muchos cristianos que no tienen comunión con el Espíritu Santo. Dice Génesis capítulo 1 que las tinieblas estaban sobre la faz del abismo y dice también que el Espíritu Santo estaba sobre la faz de las aguas. ¡Todo lo ha hecho Dios a través de su Espíritu Santo desde el principio hasta hoy!

Jesús hizo lo que hizo porque el Espíritu de Jehová lo había ungido. Leamos Lucas 4:18: El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; a pregonar libertad a los cautivos, y vista a los ciegos; a poner en libertad a los oprimidos”.

El mismo Espíritu que estuvo sobre la faz de las aguas es el Espíritu que estuvo sobre Jesús. Él había pasado desapercibido por treinta años. ¿Qué sabes de Jesús en sus primeros treinta años? ¡Casi nada! Un día lo encontraron en el templo discutiendo con los doctores de la ley y más nada, pero cuando fue a bautizarse en el Jordan vino el Espíritu Santo sobre Él en forma de paloma y se escuchó una voz del cielo que dijo: “Este es mi hijo amado en quien tengo complacencia”. ¡Inmediatamente después hizo su primer milagro en las bodas de Canaán! Los años trascendentales de Jesús fueron tres, desde los treinta hasta los treinta y tres, desde que fue ungido por el Espíritu Santo.

Tenemos también a Pedro que negó a Jesús. ¡Con qué amiguitos se rodeaba! Como sucede hoy en día, tus compañeros de trabajo nunca se enteraron que eras creyente, hasta te pareces con los hijos del mundo, pasas desapercibido. ¡No te ha brotado en diez años declarar que eres un hijo de Dios! ¡Te da vergüenza! ¡Eres tímido! Por ahí se convierte un compañero de trabajo y viene con la noticia: “¡Conocí a Cristo, me ha perdonado mis pecados!” Se lo cuenta al que nunca dijo que era creyente y él le dice. “¡Yo también soy cristiano!” ¡Qué vergüenza!

Cuando le dijeron a Pedro que era uno de los que andaban con Jesús, enseguida lo negó, volvieron a decir que hablaba como Jesús, pero Pedro juraba que no lo conocía; y la tercera vez le dijeron: “Eres uno de ellos”. Ahí empezó a maldecir declarando que no lo conocía. ¡Cobarde! Pero en el libro de Hechos 2: 1 dice la palabra de Dios que estaban todos unánimes juntos; estaban orando, pidiendo que viniese la promesa del Padre. Jesús les había dicho que no fueran a ningún lado sino que se quedaran en Jerusalén hasta recibir la promesa del Padre. Anteriormente les dijo: “Les conviene a ustedes que yo me vaya porque si así no fuera no vendría sobre ustedes el Espíritu Santo, pero si yo me voy vendrá sobre ustedes y los guiará a toda verdad.”

Cuando el creyente no tiene el Espíritu Santo va probando si le funciona algo o no; por ejemplo un hombre se quiere poner de novio o se quiere casar y es una ruleta para él, apuesta todo a la negra y no gana, después prueba con el rojo y apuesta todo lo que tiene, pero tampoco gana. ¡Va jugando al azar! El creyente que no está lleno del Espíritu Santo anda tanteando qué es lo que va a hacer en su vida. “¡Gloria a Dios, me salió un trabajo nuevo! El único problemita es que no puedo venir los domingos a la iglesia”.

Una hermana me comentó que su esposo se metió en una cooperativa de viviendas hace siete años y ella no estaba muy convencida del asunto, no la veía, entonces le decía al marido: “Si nosotros tenemos nuestra casita propia, quedémonos tranquilos, aquí somos felices.” Ella agregó: “Yo dejo mi puerta abierta porque vivo en un barrio tranquilo.”  Yo le debo creer pero me parece que está viviendo en el cielo. El asunto es que el esposo se metió en esa cooperativa ubicada en un asentamiento metiendo dinero en ésta y próximo a comenzar la construcción de las viviendas, como ganaba más de diez mil pesos no podía ser el titular entonces le pidió a ella que se anote porque es una cooperativa para gente con pocos ingresos; aunque la mujer y los hijos no están convencidos el esposo ya  está decidido. Pero antes de comenzar la construcción, los vecinos en medio de una reunión, comenzaron a insultarse, estaban a los gritos y a los tiros; una mujer andaba con una cuchilla y con  una botella de vidrio rota hirió a un muchacho. Esta hermanita decía: ¡Ahh Dios dónde me metí! Entonces le dijo al marido que no quiere vivir en ese lugar, que se quieres quedar en su casita. Y él le respondió: “Yo no me llamo una casa, si tengo que dejar la casa, los dejo a ustedes y me voy a vivir allá.” La mujer me preguntó qué hacer, y la verdad es que para darle un consejo a esta hermana necesito que el Espíritu Santo me llene nuevamente. ¡Cuánta oscuridad! ¡Todo por una casita! Hubiera sido más fácil si el Espíritu de Dios lo hubiera guiado porque dice la Biblia que el Espíritu Santo nos guía a toda verdad.

Cuando Sansón desgarraba a un león era porque el Espíritu de Jehová venía sobre él. David decía en el Salmo 51: “No alejes de mi tu Santo Espíritu”; él había probado lo que era la guianza del Espíritu Santo, y agregaba: “Y espíritu noble me sustente”.

Estamos por celebrar un tiempo que indica un hecho extraordinario en el planeta Tierra: ¡Nació el Mesías en Belén! ¡Nació Jesús! Nació del Espíritu Santo. ¡Qué merengue! José le dice a María: “¡Qué gordita estás!” Y ella le responde: “¡Fue el Espíritu Santo!” La Biblia señala que el Espíritu Santo cubrió a María; la palabra “cubrir” se usa mucho en el campo, cuando el macho cubre a la hembra. ¡El Espíritu Santo embarazó a María! Es difícil hacerle creer a José y a sus parientes y es difícil hacerle creer a la ciencia moderna que el Espíritu Santo la embarazó a María, pero de él nació un santo ser.

Yo creo que ignoramos mucho al Espíritu Santo. El gran suceso es que Jesús nació en Belén conforme a las profecías y la iglesia nació en Pentecostés conforme a las profecías. Así que cuando nació el planeta Tierra intervino el Espíritu Santo, cuando vino Cristo al mundo intervino el Espíritu Santo y cuando nació la iglesia fue en Pentecostés, vino del cielo un estruendo como viento recio y el Espíritu Santo llenó a los que estaba orando en el aposento alto. Dice la Biblia en Hechos 2 desde el capítulo 1 que hablaban en otras lenguas que no entendían y había en ese lugar gente de todas las naciones, porque era Pentecostés y los judíos viajaban desde donde estaban hasta Jerusalén, desde Asía, África, etc. y los escuchaban hablar en su propio idioma, entonces, maravillados decían: “¡Cómo puede ser esto si son galileos! ¡Cómo es que los escuchamos hablar en nuestro idioma!”

Recuerdas que Pedro era un cobarde que no se animó a decir: “¡Yo soy de Cristo!” Dice la Biblia que el Espíritu Santo llenó a Pedro y a los ciento veinte que estaban con Él, entonces se levantó y predicó. Pentecostés es la fiesta de la cosecha, ese día tres mil almas se entregaron a Cristo por la predicación de Pedro.

El Espíritu Santo no solamente alumbra sino que también es el poder de Dios. ¿Cómo fue que Jesús se levantó de los muertos? ¡Dice la Biblia que el Espíritu de Dios lo levantó con poder! Yo creo que el Espíritu Santo es el gran ignorado de la iglesia actual; muy poco sabemos de su obrar. El Espíritu Santo está en todas las obras de Dios. Y Dios ha querido que en esta guerra que no podemos enfrentar con la carne ni con nuestra voluntad porque irremisiblemente vamos a perder, y es porque la oscuridad no te deja ver bien, debemos ser llenos de luz, debemos ser llenos del Espíritu Santo para saber dónde pegar el tiro. ¡Si no te guía el Espíritu Santo vas a disparar para todos lados!

Los creyentes que no saben qué orar lo hacen más o menos así: “Señor te pido que bendigas a todo el mundo. Te pido que te acuerdes de los pobres.”  Hace cinco mil años que se acuerda de ellos, y la Biblia nos dice que nosotros debemos acordarnos de los pobres. “Señor, gracias por los alimentos, no te olvides de los que no tienen para comer.” ¡Qué falta de luz! Cuando hay falta de luz oramos: “Sana Dios a los enfermos, bendíceles.” Pero cuando uno está lleno del Espíritu Santo le sucede como a Pedro que fue a la puerta llamada Hermosa y se encontró con un cojo de nacimiento pero él supo que ese hombre se iba a levantar. Me imagino a Pedro pensando si no llegara a resultar, se da vuelta y de espaldas al cojo ora: “Señor, bendice a todos los cojos del mundo.” ¡No! Se le acerca al cojo, lo mira a los ojos y le dice: “No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda.” ¡Ese Pedro era el que había sido ungido en Pentecostés! Cuando le dijeron que no podía seguir predicando en el nombre de Jesús respondió: “No podemos callar, no podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído.” “Mire que lo vamos a encarcelar”. “¡Métanme a la cárcel pero yo no voy a callar!”  “Mire que lo vamos a latigar.” “¡Latíguenme pero a mí no me van a parar!”  ¡Igualito que a ese cristiano que lleva diez años en el trabajo pero nadie se ha enterado nunca que es creyente!

Si quieres seguir errando, ignora al Espíritu Santo, si quieres continuar llevando las riendas de tu vida ignora al Espíritu Santo, pero si quieres tener luz en tus decisiones, si quieres tener claridad, clama a Dios que te llene con su Espíritu Santo.

¿Sabes lo que hizo Dios conmigo? Me cortó todos los víveres y anduve cinco años pidiéndole que me muestre lo que quería de mí. Al final me dijo: “Yo quiero que seas pastor”. A esas alturas, fuera lo que fuera que Él me pidiera yo le iba a responder que si. Yo me había burlado del Espíritu Santo, criticaba a los pentecostales que hablaban del bautismo y de la llenura del Espíritu Santo, me mofaba de ellos, pero Dios me hizo desear ser lleno de su Espíritu. Iba llorando y le decía: “¡Lléname, lléname!” ¡Y no me llenaba! Veía a los otros que estaban llenos del Espíritu Santo y le decía a Dios: “¡Yo quiero eso!”, pero no me lo daba. Cuando quedó claro que yo lo deseaba en serio, ¡me lo dio!

¿Para qué te va a dar el Espíritu Santo si posiblemente te interesa más un aumento de sueldo que su Espíritu? Posiblemente te quita el sueño el deseo de tener una casa que ser lleno del Espíritu Santo. Posiblemente te interesa más tener un novio o una novia que ser llena/o del Espíritu Santo. Tú quieres que tus negocios funcionen y prosperen, te interesa más eso que ser lleno del Espíritu Santo. ¡Pero te aseguro que si estás lleno del Espíritu Santo, Él te hará triunfar en los negocios! ¡Si estás llena del Espíritu Santo vas a encontrar el novio exacto y no tendrás que andar probando! ¡No solamente te vendrá un aumento sino que te saldrá un nuevo empleo en el que ganes el doble porque el Espíritu Santo guía al creyente a toda verdad!

¡Amo la gracia de Dios! No amo lo que tengo sino lo que Él me da y anhelo lo que Dios tiene para mi; a veces no se siquiera lo que tiene para mí pero quiero exactamente eso y estoy seguro que Dios quiere llenarme y quiere llenar a la iglesia con su Espíritu Santo. ¡Estoy seguro que la iglesia tiene un propósito extraordinario en los planes de Dios!

CONCLUSIÓN

Como habrás visto en toda la historia de la humanidad, el artista principal es el Espíritu Santo. No habría iglesia si el Espíritu Santo no hubiera ungido a esos ciento veinte que estaban orando. Hay una verdad espiritual escondida detrás de cada realidad visible, hay una realidad invisible detrás de cada circunstancia y si no estás lleno del Espíritu Santo verás sólo lo que está delante de tus ojos pero no tendrás la mirada que te ayuda a ver más allá de las circunstancias.

Mi oración es que hoy seamos llenos, que Dios haga abundar su llenura en mí para que mis mensajes sean más poderosos y para que destruyan los poderes de las tinieblas que operan en tu mente. ¡Estamos en guerra! Así como me han dicho que están haciendo trabajos de brujería para que yo tenga un accidente, pero no sucederá como ellos quieren porque hay mucha gente que ora por mí, seguramente también están haciendo trabajos contra los cristianos verdaderos, llenos del Espíritu Santo. Yo tuve un gran enemigo, el pai Ayala, presidente de la umbanda en Uruguay; ese hombre me hizo todos los trabajos habidos y por haber para destruirme porque su hija se convirtió a Cristo, aunque ella estaba consagrada por él para ser su sucesora. ¡El asunto es que ese hombre murió muy mal y yo aquí estoy todavía vivito y coleando!

Me han comentado también que le hicieron un trabajo de brujería a una de nuestras pastoras para que se muera de cáncer en la matriz y yo se que se hacen esos trabajos. En nuestra iglesia hay una mujer que odiaba a su padre y le hizo un trabajo de vudú para que se muera y se murió. Pero si no le estorbas a Satanás, ¿qué trabajo te pueden hacer a ti? Solamente te van a romper el matrimonio nada más, te van a tener ciego, pero quiero decirte que esta guerra que estamos librando es una lucha entre poderes espirituales y tú eres el portador del Espíritu Santo o de las mentiras del infierno. A muchos religiosos Jesús les dijo:”Ciegos, guías de ciegos, los dos caerán en el pozo”. Yo no sé cómo algunos cristianos son tan audaces para dar consejos cuando ellos mismos están dentro de un pozo; fracasan y fracasan pero ellos quieren seguir dando consejos.

¡Hoy es un tiempo especial! Dios ha determinado que honremos su Espíritu y abramos el corazón para ser llenos de su Espíritu Santo. ¡Muéstrale a Dios el deseo que tienes de Él! Si realmente quieres ser quemado por el fuego del Espíritu Santo, haz esta oración: Padre amado, reconozco que he estado lejos de ti, preocupado por lo que me falta, por lo que deseo, pero no preocupado para que tú me llenes con tu Santo Espíritu. ¡Perdóname! ¡Te entrego mis deseos! ¡Te entrego mis planes y abrazo los tuyos! ¡Lléname de tu Espíritu Santo! ¡Haz de mí como hiciste con Pedro! En el nombre de Jesús hago esta oración, amén.

 

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