EN LOS CAMINOS DE DIOS, HALLAREMOS DESCANSO - Misión Vida para las Naciones

Av. 8 de octubre 2335

Montevideo

WhatsApp:(+598) 095333330

MENSAJES DEL CIELO

EN LOS CAMINOS DE DIOS, HALLAREMOS DESCANSO

Hoy estudiaremos Isaías capítulo 55:2-11:

2¿Por qué gastáis el dinero en lo que no es pan, y vuestro trabajo en lo que no sacia? Oídme atentamente, y comed del bien, y se deleitará vuestra alma con grosura. 3Inclinad vuestro oído, y venid a mí; oíd, y vivirá vuestra alma; y haré con vosotros pacto eterno, las misericordias firmes a David. 4He aquí que yo lo di por testigo a los pueblos, por jefe y por maestro a las naciones. 5He aquí, llamarás a gente que no conociste, y gentes que no te conocieron correrán a ti, por causa de Jehová tu Dios, y del Santo de Israel que te ha honrado.

6Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano. 7Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar. 8Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. 9Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos. 10Porque como desciende de los cielos la lluvia y la nieve, y no vuelve allá, sino que riega la tierra, y la hace germinar y producir, y da semilla al que siembra, y pan al que come, 11así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié”.

Este pasaje habla de determinados esfuerzos e inversiones que no sacian verdaderamente; todos los días, todas las semanas y todos los años, hablo con gente que ha invertido su vida en cosas que no aprovechan, que ha puesto sus esperanzas en proyectos que terminan siendo un fracaso, que ha invertido sus fuerzas y ha puesto lo mejor de sí, esperando y confiando pero la vida y las circunstancias le ha “pateado en contra”. ¡Están desilusionados de la vida y quieren morirse! Vivimos en un mundo que decepciona a las personas, el hombre ha decepcionado al hombre. Un ateo me dijo: “El hombre ha inventado a Dios”, el ateísmo y el humanismo han puesto su confianza en el hombre pero la Biblia dice: “Maldito el hombre que confía en el hombre”. Son dos filosofías opuestas: El humanismo contra la palabra de Dios.

EL CORAZÓN DEL HOMBRE ES ENGAÑOSO

Pero, ¿por qué hay gente decepcionada? ¡Porque ha confiado en el hombre! También dice la Biblia: “Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá? Yo Jehová, que escudriño la mente, que pruebo el corazón…” Jeremias 17:9-10.

Asimismo la Biblia habla que el hombre no conoce su propio corazón, sino sólo Dios quien ve lo que hay dentro de él. Yo he tratado en mi propia vida y con muchas personas que están decepcionadas de sí mismas y me han dicho: “¡No puedo creer que yo haya hecho esto!” ¿Por qué le sucedió eso?  Porque confió en su cultura, en su formación, en su voluntad.

Tenemos dos caminos para caminar: Uno es el rumbo de la ilusión y otro el de la fe. ¿Por qué es engañoso nuestro corazón? Porque nos ilusiona y nos hace sentir cosas; es frecuente el caso de maridos que le dicen a sus esposas: “Te soy sincero, ya no siento lo mismo por ti”. ¡Tu corazón está pervertido! ¡No confíes en él! El humanismo cree en el hombre y la Biblia dice: No creas en el hombre. ¿Quién tendrá la razón? Muchos de nosotros nos hemos decepcionado con muchas decisiones que hemos tomado. ¿Y por qué lo hicimos? ¡Porque lo sentimos! El humanismo dice: “Si lo sientes, hazlo, si te causa placer, hazlo, mientras no hagas daño a nadie”. ¡No confíes en ti mismo! Es por confiar en nosotros mismos que estamos decepcionados.

Recientemente vino un hombre presentándome sus cartas de evangelista, sin embargo, tenia un pequeño problema: ¡Se había divorciado diez veces! El hombre no supo elegir y tomar sus decisiones para formar su matrimonio pero él tenía la forma para transferirle la culpa a las mujeres. Muchas veces venimos a la iglesia desengañados, diciendo: “Me engañó éste y aquel”, pero no somos capaces de reconocer: “Tonto de mí que no me di cuenta que este era un mentiroso y un engañador”. Venimos desengañados de los otros pero no nos damos cuenta que somos tan ciegos como quienes nos engañaron.

FE E ILUSION

Dijimos que hay dos caminos: El de la ilusión y el de la fe. La Biblia dice que todo lo que proviene de fe, proviene de Dios y que todo lo que no proviene de la fe es pecado. Lo que proviene de la fe, es perfecto, no es adivinación, no es percepción extrasensorial. “Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”, dice la Biblia en Hebreos 11:1. La fe es el camino a lo que no se ve, es la revelación de la verdad de Dios, es poder ver qué es lo que Dios tiene para mí y poder hablarlo y confesarlo antes que suceda y decir: “¡Yo sé que sucederá!” La fe no es azar, es seguridad y certeza; el hombre ha creado otros caminos: La cinta colorada, las cartas, la adivinación, la nicromancia, etc.

¿Y qué es la ilusión? Es algo pasajero, un espejismo, una fantasía, una espera de que algo se cumpla, es algo que pudiera ser o que también pudiera no ser, no tengo la certeza de que sucederá, es un castillo de naipes, ¡una estupidez! La ilusión es algo que te puede traer grandes decepciones, grandes deseos de muerte. ¡Qué triste apostar a una ilusión, a algo que pudiera ser o no! ¡La ilusión hace que llores, que te deprimas, que te angusties! ¡No quiero vivir de ilusiones sino de fe! Jesús no es una ilusión pero Batman y la Mujer Maravilla sí lo son.

Parafraseando el pasaje de Isaías, éste diría: “Por qué gastan la plata en lo no es pan y ponen su trabajo en lo que no aprovecha, ¡oigan! y será saciada vuestra alma”. El deleite del alma no está en lo que el hombre te enseña, o en lo que el hombre inventa, sino en oír la palabra de Dios: ¡Ella es el sustento del hombre! La ilusión es una mentira pero Jesús dijo: “Yo soy el camino, la verdad y la vida”. Uno de sus nombres es “Fiel y verdadero”. Tu puedes vivir seguro si crees en la palabra de Dios, si pones tu esperanza en Dios será saciada tu alma, él no es hombre para que te engañe, él es fiel y verdadero.

Hoy hablé con la mamá de una chica que se ha desengañado de la iglesia; dejó todo y se transformó en la secretaria principal de un mentiroso, un engañador y un estafador, ¡Qué triste cuando personas que se llaman cristianas, apuestan su vida en un engaño, en una ilusión y en una mentira! Cómo le gusta al diablo que la gente se acelere deseando e inventando cosas que no son; por ejemplo, los “viajes” que se hacen los que se drogan son sólo ilusión y mentira. ¡Así le pasa al hombre con sus caminos y sus pensamientos!

LOS CAMINOS DE DIOS SON MÁS ALTOS QUE LOS NUESTROS

En el pasaje de Isaías que leímos, dice que los caminos del hombre son una cosa y los caminos de Dios son otra cosa; Dios nos dice: “Inclinen el oído para escucharme bien, y se deleitará vuestra alma”. El humanismo ha llegado a creer que el deleite del alma es la ilusión, la fantasía, las películas. ¿Quieres ver cosas bien mentirosas? ¡Mira las películas! Por ejemplo, es común ver una detective con un bello peinado que tiene una lucha encarnizada con otra persona, pero cuando acaba la pelea, tiene el peinado más esplendoroso que al principio.

Todas esas ilusiones le producen deleite a la carne pero cada vez que tu quieres saciarte con esas cosas quedas vacío; el alma sólo se deleita y se llena con la verdad, que no está en la filosofía, ni en la historia, ni en el hombre. ¡El único que tiene la verdad es Jesucristo que dijo: Yo soy el camino, la verdad, y la vida”! ¿Has dicho alguna vez, “estoy con el alma por el piso”? ¿Cuándo estás así? ¡Cuando vives de ilusiones! Muchas veces nuestra alma está en el CTI, desanimada, y cuando creemos que no tenemos solución, nos viene el pensamiento de la muerte, cuando el alma no está vivificada se acerca la muerte. Hay un alimento que no es lo que comemos, “no sólo de pan vivirá el hombre sino de toda palabra que sale de la boca de Dios” dice la Biblia. La palabra de Dios es la que vivifica, sacia y levanta el alma. ¡Si tu no escuchas la palabra de Dios, tu alma andará por el piso! Si quieres experimentar lo que es andar con el alma por el suelo, deja a Dios, pero si quieres un alma vivificada y fortalecida, presta atención a la palabra de Dios.

Hay muchas personas que son buenas en su propia opinión, dicen: “Yo no le hago mal a nadie, no engaño ni quiero que me engañen”; ¡pero nos engañamos a nosotros mismos y a los demás! Aun las personas que tienen un alto concepto de sí mismas, si se han olvidado de Dios, se han olvidado de la verdad y están viviendo de ilusiones y lo que dicen son meras palabras, meras ilusiones.

CONCLUSIÓN

Si hay alguien que ha mordido el polvo de la decepción, del fracaso, si estás con el “alma por el suelo”, en soledad y tristeza, si no entiendes por qué has fracasado y por qué te han pagado tan mal, si no has tenido en cuenta a Dios en tu vida y no le has dado el primer lugar y has caminado en tus propios caminos de la ilusión, de los deseos, Dios hoy te dice: “Mis pensamientos no son tus pensamientos ni tus caminos mis caminos”. ¡Dios hoy te quiere invitar a subir a otro nivel de pensamientos y de caminos! Dice la Biblia que los que hemos creído en Cristo Jesús, tenemos la mente de Cristo. Yo pienso como Cristo piensa y cuando le he dicho que tome mi vida, he desistido de mis pensamientos y he abrazado los suyos, he dejado que sus caminos sean los míos y aunque yo amaba algunos deportes, los sacrifiqué y subí a los caminos de Dios y una vez que estuve en ellos, dije: “¡Estos caminos son perfectos y buenos!”

Si has vivido en tus propios caminos y pensamientos y hoy quieres dejarlos, es momento que le digas a Dios: “¡Padre! Quiero conocer tus caminos y tus pensamientos. Te abro mi corazón, perdóname porque hasta ahora he vivido en mis propios caminos y pensamientos. Quiero tener tratos contigo, quiero conocerte. ¡Quiero que vengas a mi corazón! Necesito que des deleite a mi alma y la vivifiques. Creo que tu lo haces ahora mismo, en el nombre de Jesús, amén”.

MENSAJES

MISIÓN

VIDA

PARA LAS NACIONES

Av. 8 de octubre 2335

Montevideo, Uruguay

WhatsApp: (+598) 095 333 330

email: info@misionvida.org

twitter: misionvidauy

facebook: iglesiamisionvida

Diseño: VerakaWeb