TEMOR DE DIOS = CLAVE DEL ÉXITO

INTRODUCCIÓN

Dios tiene planes con el mundo y Él ha hecho todo para su gloria: las estrellas, la luna, el sol, los planetas, etc. ¡Todo ha sido creado para mostrar la grandeza de Dios! Todas sus obras le alaban porque éstas son la consecuencia de su sabiduría, su inteligencia y su poder. Nosotros no tenemos idea de cómo hacer flotar la Tierra en la nada, sin embargo, Dios creó las fuerzas que hacen que los planetas estén suspendidos en la nada y viajen dentro de una ruta establecida en el cielo.

Dios le ordenó al profeta Habacuc que escribiera una visión y la hiciera correr para que se sepa en todo el mundo en la posteridad y le dijo: “Porque la tierra será llena del conocimiento de la gloria de Jehová, como las aguas cubren el mar”.

Los rusos han entrado en Siria muy cerca de Israel y están bombardeándolo, en tanto que Irán es aliado de Siria y prometió destruir a Israel; muchas naciones están sin saber qué hacer con el problema que sigue subsistiendo en Medio Oriente. Están los del movimiento de Hamas en la franja de Gaza queriendo destruir a Israel y los yihadistas desde adentro matando a sus habitantes. También está el tema de dólar y no se sabe qué pasará con la moneda, por otro lado los economistas sin saber qué acontecerá con la economía en el mundo. Están los poderosos de la tierra debatiendo en la Organización de Naciones Unidas, y yo digo que se han equivocado de nombre porque es una Organización de Naciones Desunidas. Hay peste en el mundo, hay hambre, miseria y pobreza en la tierra más que en décadas y siglos anteriores, y esto no se arregla con sabiduría e inteligencia humana ni con poder humano.

Pero Dios, que ha hecho todo con propósito, a pesar de que el hombre lo ha despreciado y rechazado, a pesar de que lo niegan, el Señor promete que la tierra será llena de su gloria así como las aguas cubren el mar. ¡No van a vencer los que niegan a Dios! ¡Los que rechazan a Dios no se adueñarán del planeta porque Dios hizo el mundo para su gloria! El Señor no mandará un ejército de ángeles para destruir todo lo que tenga que ser destruido sino que alistará un ejército de terráqueos para ganar a quienes van a reinar sobre la tierra con el amor de Jesucristo, con el poder y la gloria de Dios. El Señor no les ha dado a los ángeles autoridad sobre el planeta sino que puso al hombre para gobernar en él y levantará hombres y mujeres que serán bendición para el mundo. Dios avergonzará la sabiduría de los sabios; los filósofos se avergonzarán de su filosofía y los poderosos de su poderío porque reinará su presencia en la tierra. La gloria de Dios que va a inundar la tierra es la gloria que está sobre la cabeza de cada creyente, quienes son sus fieles representantes, porque el Señor derramará de su Espíritu sobre toda carne, sobre mujeres, hombres y niños.

¡Habrá niños llenos de la gloria de Dios desde el vientre de sus madres! Lucas capítulo uno señala que María fue a visitar a su prima que estaba embarazada de Juan el bautista y cuando oyó Elisabet la salutación de María, la criatura saltó en su vientre y Elisabet fue llena del Espíritu Santo. ¡Se viene un mover del Espíritu de Dios! Claro que primero le toca al hombre mostrar cuánto puede y éste está demostrando fehacientemente que no puede. Los más sabios y poderosos de la tierra no saben qué hacer con el planeta, pero tengo buenas noticias: ¡Dios sí sabe qué hacer!

EL TEMOR DE JEHOVÁ TE HACE SABIO

Leemos en Isaías 11:1 al 4: “Saldrá una vara del tronco de Isaí, y un vástago retoñará de sus raíces. Y reposará sobre él el Espíritu de Jehová; espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de poder, espíritu de conocimiento y de temor de Jehová. Y le hará entender diligente en el temor de Jehová. No juzgará según la vista de sus ojos, ni argüirá por lo que oigan sus oídos; sino que juzgará con justicia a los pobres, y argüirá con equidad por los mansos de la tierra; y herirá la tierra con la vara de su boca, y con el espíritu de sus labios matará al impío”.

Este es un texto profético escrito setecientos cincuenta años AC, aproximadamente dos mil setecientos treinta años atrás. Isaías menciona aquí el tronco de Isaí y si pensamos en un árbol, Isaí vendría a ser el tronco; él es el padre del rey David y éste es padre de Salomón y siguiendo con el linaje llegamos a José y a la virgen María. Jesús fue descendiente de Isaí por parte de padre y madre, por eso hay dos genealogías en los evangelios, una es la de María y la otra de José, y las dos llegan a Cristo. Cuando dice la Biblia que saldrá una vara del troco de Isaí se refiere al rey David; y un vástago, o sea un brote de la vara, se refiere a Cristo. De Isaí sale la vara que es David y de éste surge un vástago o retoño en quien reposará el Espíritu de Jehová, espíritu de sabiduría, de inteligencia, de consejo, de poder, de conocimiento y de temor de Jehová. Y le hará entender diligentemente en el temor de Jehová.

Jesús dijo: “Yo no he venido a hacer mi voluntad sino la de mi Padre”. Si hay alguien que tuvo temor de Dios fue Jesucristo y Él no hizo su propia voluntad sino la del Padre; ese descendiente o retoño del cual habla Isaías es Jesucristo. Sobre el Señor reposó el Espíritu de Jehová, espíritu de sabiduría, espíritu de inteligencia, espíritu de poder, espíritu de temor de Jehová y le ha hecho entender diligentemente en el temor de Jehová.

Quiero hoy hacer un énfasis especial en lo que es el temor de Jehová porque hay una corriente dentro de la iglesia cristiana y evangélica que quiere desvirtuar este término y dicen que a Dios no hay que temerle, pero yo hoy te digo que a Dios hay que temerle. Esa corriente señala que no se trata de que haya que tenerle temor a Dios sino respeto y la Biblia en varios lados habla del temor de Jehová. ¿Por qué hay que temerle, acaso Dios es un tirano? ¡El temor de Jehová es el único que sirve!

Después que el hombre pecó y le entregó a satanás la autoridad que Dios le había dado a él, el Señor ya tenía planificado que de todas maneras un grupo selecto de personas en el mundo sería lleno de poder y de sabiduría, y ¿sobre quién reposó ese espíritu primero? Sobre Jesús de Nazaret de quien el Padre dijo: “Este es mi hijo amado en quien tengo complacencia”. Entonces Dios usó poderosamente a Jesús.

Por si no te has dado cuenta, el cristianismo no es una estupidez que anda dando vueltas al mundo sino una revolución que comenzó hace dos mil años y ha invadido todas las naciones, y está creciendo cada vez más. ¡Las cosas no son como las cuentan las noticias! Algunos se enojan diciendo que no nos podemos meter en política porque no nos corresponde opinar en ese ámbito y tampoco nos podemos meter en otros asuntos del país porque somos fanáticos y oprimimos a la gente con reglas y normas de Dios. El Señor dice: “…miraré a aquel que es pobre y humilde de espíritu, y que tiembla a mi palabra” (Isaías 66:2).

Esas personas que se levantan contra Dios no lo conocerán ni conocerán su poder y nunca operará sobre ellos ni la sabiduría ni la inteligencia que hay en Él porque no tienen temor de Dios. El Señor tiene un plan y siempre estuvo en su corazón que quienes iban a gobernar la tierra serían hombres que tuvieran una buena relación con Él. Dios no va a usar ángeles, arcángeles, querubines ni serafines sino a gente sencilla, y avergonzará la sabiduría de este mundo con personas que tengan su sabiduría porque el Espíritu de temor de Jehová estará sobre ellos.

Hay mucha gente que clama por tener una buena situación económica, familiar, etc y no saben que si tuviesen sabiduría, el Señor les guiaría a través de ella, a saber cómo resolver su situación familiar, laboral, de salud, económica, etc. Quien tiene sabiduría logra prosperar; quien tiene sabiduría sabe cómo tratar con la suegra, con el cónyuge y los hijos. Los hombres y las mujeres no saben qué hacer con su cónyuge y desean que se muera porque ya no se aguantan, las madres no saben qué hacer con sus hijos, se quejan porque son desobedientes, nerviosos y ansiosos pero no se dan cuenta que las que están nerviosas y ansiosas son ellas. ¡La gente no sabe cómo vivir bien! No saben cómo mantener encendida la llama del amor en la familia porque les falta sabiduría y si oraran a Dios por sabiduría, lograrían muy buenos resultados en muchas decisiones que toman.

Todos los días tomamos decisiones y todas ellas tienen consecuencias. Somos el resultado de las decisiones que tomamos y si tus decisiones no son sabias, los resultados no serán buenos y la sabiduría no viene por estudiar matemática, física o química. ¡La sabiduría viene del Dios del cielo!

LA REVOLUCIÓN DEL CRISTIANISMO

El Señor derrama su Espíritu de sabiduría, el mismo que vino sobre Jesús y Él inició la revolución más grande que ha habido en la historia del mundo y es la revolución del cristianismo. Este fuego se encendió en los cristianos de tal manera que estuvieron dispuestos a ir a la hoguera pero nunca iban a negar su fe en Jesús; estaban dispuestos a morir bajo las fauces de las fieras del circo romano pero nunca iban a renunciar a su fe y jamás confesarían que no amaban a Jesús ni que ya no iban a creer más en Él. Preferían ir a la muerte y eran quemados sobre las piras de fuego pero morían cantando himnos a Dios. ¡Hay un fuego que cuando se enciende, nada ni nadie lo puede apagar y ese fuego quiere arder en ti! Una vez que se enciende, uno está dispuesto a perder lo que hay que perder con tal de no retener ese fuego. La Biblia señala que cuando descendió el Espíritu Santo sobre la primera iglesia, hablaban lenguas de fuego que fueron repartidas sobre cada uno y ya el imperio romano no los podía frenar. El César era el soberano del imperio más grande que ha habido en la tierra y éste declaró que él era dios. La palabra “Dominicus”, de donde se deriva el término domingo significa día del Señor y la expresión “señor” no se utilizaba como se estila hoy día, ya que le decimos señor a cualquier sinvergüenza. En aquella época sólo se le decía señor al César y aquel que se negaba a declarar: “César es señor”, era pasible de muerte. Pero cuando el Señor Jesús se apoderó del corazón de los creyentes, éstos ya no podían confesar que el Cesar era señor. Las personas del imperio romano levantaba su mano derecha y en lugar de decir buen día, declaraban: “César es señor”. En cambio los cristianos no podían hacer eso porque ahora tenían otro Señor, por lo que renunciaron a cualquier otro señorío y se aferraron al señorío de Cristo. Ellos levantaban la mano y declaraban: “Jesucristo es el Señor”, y eso era motivo para que los quemaran vivos, para que los crucificaran y mataran; eso era motivo para que los arrojaran en las arenas del circo romano y ahí la gente se divertía viendo cómo eran devorados por las fieras. Pero el fuego que salió de allí invadió la tierra y por más de dos mil años el evangelio se ha predicado en todas las naciones; y la Biblia es el libro que habiendo sido traducido en varios idiomas es el más leído en el mundo.

¡A Cristo no lo detiene nadie! ¡Al Espíritu de Cristo nadie lo puede frenar! Las cosas son como Dios lo ha dicho, Él dijo que derramaría su Espíritu sobre toda carne y declaró también que la tierra sería llena del conocimiento de la gloria de Dios así como las aguas cubren el mar. Pero no cualquiera tendrá esto sino aquellos que han decidido renunciar a sí mismos y a todo lo que aman para que el amor de Dios sea lo primero en sus vidas.

El primer hombre en el mundo que hizo la voluntad de Dios y nunca lo decepcionó, el primer hombre que fue revestido con el poder del Espíritu Santo y sobre quien reposó el espíritu de sabiduría, de inteligencia y de poder fue Jesús. Hasta qué punto el planeta está contaminado que el hombre carece de poder; un borracho se arrodilla delante de su esposa y le promete mil veces que nunca más va a beber pero siempre claudica ante la bebida. ¡No tiene ningún poder! El drogadicto dice que dejará de drogarse pero no tiene poder para hacerlo. El que peca dice: “Tengo que dejar de pecar”. ¡Pero no puede! Cuando se apodera el mal en las personas hacen que los padres hagan cosas aborrecibles como por ejemplo abusar de sus hijos e hijas menores. Un hombre se me presentó un día y me dijo: “Esta es mi hija”, ella tenía unos doce años. Él continuó diciéndome: “Yo abuso sexualmente de mi hija casi todos los días y me aborrezco por hacerlo, mientras la estoy abusando pienso qué sucio soy y no quiero volver a hacerlo, pero es inútil”. ¡No hay poder en el hombre! ¡El poder está en Dios! Yo digo siempre que una abuela viejita en una cama de hospital a punto de morir puede abrir su boca y decirle al demonio más grande del infierno con toda autoridad: “Te ordeno en el nombre de Jesús que te vayas” y esa abuela tiene más poder que un hombre joven y sano. ¡Las personas que son ungidas con el Espíritu Santo tienen el poder de Dios! Yo les digo a los abuelos y a las abuelas que no dejen de orar porque la oración de ellos tiene poder y mucha gente ha sido rescatada por causa de la oración de esa abuela o ese abuelo que cree en Dios. ¡Vas a salvar a tus nietos, abuela! Si el Espíritu de Dios está sobre ti no hay poder que se te oponga por más débil que te encuentres, aunque estés en silla de ruedas o internada, cree que Dios escuchará tu oración y obrará con poder.

El poder más grande que existía en la época de Jesucristo era el imperio romano pero éste sucumbió. Benjamín Netanyahu, primer ministro de Israel se lo ha recordado al mundo en una cumbre en la ONU y les dijo a los presentes, que los imperios que trataron de destruir a Israel no han podido; lo hicieron los asirios, los griegos, los romanos, pero esos imperios ya no existen en cambio Israel aún sigue en pie.

DIOS QUIERE UNGIRTE CON SU ESPÍRITU

Dios tiene planes con el planeta Tierra, Él todo lo ha hecho con propósito y nos ha creado para que gobernemos en el mundo y también para que tengamos sabiduría para tratar con las suegras, con el cónyuge y los hijos. Las madres se preguntan qué hacer con sus hijos y éstos se preguntan qué hacer con sus madres.

He dicho siempre que el temor es malo ya que las personas que son gobernadas por éste son cobardes porque ese sentimiento no les deja hacer nada, por lo que el temor exige obediencia. Una persona que tiene temor ni siquiera obedece a Dios ya que si el Señor les manda a predicar el evangelio siente temor de que se burlen de él y quiero decirte que la vergüenza y la timidez son formas de temor; entonces quienes tienen timidez o vergüenza hacen sólo lo que esas sensaciones les permiten y lo que no les permiten no lo hacen. La vergüenza hace que no puedas decirle al verdulero que el vuelto que te dio está mal, entonces prefieres perder cien pesos que pasar vergüenza. El temor, la vergüenza y la timidez te bloquean y te convierten en una persona inútil. ¡Pero Dios te ha creado para grandes hazañas! ¿Quieres saber de un tímido? Yo, Jorge Márquez. Yo era muy tímido a no ser cuando estaba con otros, ahí sí, me animaba a hacer cosas que cuando estaba solo, no me animaba. Y mi pastor Roberto Passo, cuando llegué a determinada edad, me dijo: “El domingo predicas vos”. Entonces empecé a armar el mensaje, lo medité, lo escribí punto por punto y me lo aprendí de memoria porque no me animaba a expresarme en público, ya que comenzaba a tartamudear y terminaba confundiéndome; pero esta vez estaba decidido y durante toda la semana en el fondo de mi casa leía todo lo que había escrito hasta que lo memoricé; aun controlaba el tiempo porque tenía veinte minutos para predicar, entonces logré ajustar todo lo que tenía que decir en veinte minutos. Llegó el día en que tenía que predicar delante de la congregación, estaba parado yo en el pulpito y cuando miré mis anotaciones, las letras se me movían para todos lados, ni siquiera podía leer la Biblia, entonces comencé a hablar con vergüenza y cuando terminé todo lo que tenía que decir, suspiré, pero cuando miré el reloj noté que sólo habían pasado cinco minutos. ¡Cómo me costaba hablar! ¡Ahora mi señora me dice que no me extienda mucho!

¡Dios quiere transformar tu vida hoy! La vida de Jesús cambió el día que vino el Espíritu Santo como paloma y reposó sobre Él. La Biblia dice: “Y reposará sobre él el Espíritu de Jehová; espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de poder, espíritu de conocimiento y de temor de Jehová. Y le hará entender diligente en el temor de Jehová”. ¡No hay poder, sabiduría e inteligencia como en el Espíritu Santo! El primer hombre en el mundo que fue ungido con ese Espíritu y en quien reposó ese Espíritu fue Jesús. Pero nosotros hemos sido destinados para recibirlo también. Jesús oró al Padre: “…Como tú me enviaste al mundo, así yo los he enviado al mundo… La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno”. El Señor les dijo a sus discípulos: “Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré… Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir”.

¡Ese es el Espíritu que están necesitando los cristianos para llevar a cabo la revolución que el mundo necesita! ¡No es mérito de filósofos, científicos o políticos, es la gloria de Dios! Yo era un arquitecto que quería satisfacer su ego haciendo edificios lindos, uno de mis proyectos era jugar al vóley pero no había sabiduría, no había inteligencia ni poder en esos proyectos. Y un día Dios me cautivó y cuando el Señor cautiva a alguien le hace abandonar sus propios planes personales para entrar en sus proyectos y esto no es para algunos sino para todos los creyentes. Si eres cristiano, el propósito de tu vida es dar gloria a Dios y mostrarla al mundo, es hablar las palabras de Dios y que habite sobre ti el poder del Espíritu Santo y el temor de Jehová.

Yo dije que el temor te inutiliza; si quieres subir, el espíritu de temor te dice que tienes vértigo, entonces tú no subes porque estás obedeciendo al temor y ese espíritu no te deja avanzar. Entre la vergüenza, la timidez y el temor los creyentes pierden la vida y no honran a Dios. Los cristianos dicen: ¿Y si me falta para comer? ¿Cómo va a hacer Dios? ¿Me va a arrojar la comida desde el cielo?” ¡Incrédulos! Jesús dijo: “Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas” (Mateo 6:33). “Yo por mi lo hago pero no quiero que le falte la comida a mis hijos”, dicen algunos. ¡Busca primero el reino de Dios y su justica! Tú dirás: “Claro, para usted es fácil…” Para mí no ha sido fácil, hay un precio que pagar para ser lleno del Espíritu Santo; hay que soltar los amores y tantas cosas a las que estamos aferrados. “Yo le pedí a Dios esta casa y Él me la dio así que no voy a ir a predicar a otro lado”. ¡Te aferraste a la casa que Dios te dio!

La esposa de Abraham era estéril, toda la vida desearon tener un hijo y cuando Dios se los dio, Abraham lo amó demasiado y a Dios eso le molestó, entonces le dijo: “Quiero que me sacrifiques a tu hijo en un lugar que yo te mostraré”. Abraham tuvo que tomar la decisión de obedecer y cuando estuvo a punto de matar a su hijo, el Señor le dijo: “Ya está, era una prueba. Ha quedado demostrado que me amas más a mí que a tu propio hijo”. Dios te pudo haber dado una familia pero también puede pedirte que dejes a tu familia por causa del reino de los cielos; te ha dado una casa y puede pedírtela por causa del reino de los cielos. Uno de nuestros pastores, toda su vida soñó con tener casa propia y siempre dijo que nunca iba a alquilar sino que tendría su casa, entonces se involucró en una cooperativa de vivienda y logró su sueño, también conoció una joven de la que se enamoró y se casó. Cuando yo fui a conocer su casa vi que la tenían muy bien arregladita, ¡hermosa! Al entrar, le pregunté: “¿Cuándo vas a vender la casa para dedicarte tiempo completo a la obra?” ¡Era el sueño de su vida! Entonces me respondió: “Pastor, cuando usted me diga lo hago”. Pasaron unos dos años y entonces se me acerca y me dice: “Pastor, usted me ha dicho que venda la casa, mire que yo estoy dispuesto”. Hoy no tiene su casa propia pero está al frente de un hogar de veintidós hectáreas donde hay unos treinta chicos. ¡Dios lo ha prosperado mucho! Doy testimonio que el hogar donde Gabriel es encargado, durante el periodo en que estuvimos construyendo el templo, ha hecho aportes y ofrendas significativas. ¡Dios ha prosperado al pastor Gabriel! Él, en un tiempo tenía un vehículo que daba pena y había que empujarlo dos por tres, hoy tiene vehículos nuevos que ha comprado y terminado de pagar y ha ayudado a otros hogares para que tengan también, aún su esposa tiene su propio vehículo. ¡Gabriel estuvo dispuesto a perder!

El temor te paraliza y te vuelve cobarde; el temor se enseñorea de ti, tú haces lo que éste te permite y dejas de hacer lo que no te permite y así deshonras a Dios porque por causa de ese temor no le obedeces. ¿Tú no estás dispuesto a perder tu casa? ¿No quieres que Dios te mande a otro país? ¿Qué te da miedo perder? ¿Cómo funciona el temor? Te lo explico con un ejemplo: Hay un hombre grande de dos metros de altura, fornido, y la esposa le pide que le busque la ropa de la cuerda. Es de noche, entonces el grandote le dice: “No, anda vos”. Tiene miedo y no se anima a destender la ropa porque es de noche o por el contrario sale al patio caminando sigilosamente y siente que alguien lo persigue, entonces comienza a silbar. ¡Tiene temor el cobarde grandulón! Y que no se le aparezca algún gato porque el grandote sale corriendo despavorido y arrastra por el suelo la ropa limpia…

CONCLUSIÓN

¿Eres de esas personas que duerme con la luz encendida? Es que si apagas la luz se aparece el cuco y si la enciendes desaparece. ¿Quién se beneficia cuando duermes con la luz encendida? ¡Las empresas que te brindan energía eléctrica! Ellos sueñan con que haya mucha gente que tenga miedo y duerman con la luz prendida. Pero el que tiene temor de Jehová le obedece a Él, todo otro temor sirve sólo para obedecer estupideces pero el temor de Dios es el que hace que tú le obedezcas. Tú te apartas del mal porque tienes temor de Jehová, de lo contrario harías lo malo.

Leemos en Proverbios 22:4: “Riquezas, honra y vida son la remuneración de la humildad y del temor de Jehová”. ¡A quien tiene temor de Jehová le va bien, hace las cosas bien y todo sale bien! ¡Tendrá riquezas, honra y vida!

Y Proverbios 16:6 dice: “Con misericordia y verdad se corrige el pecado, y con el temor de Jehová los hombres se apartan del mal”. La gente dice que nosotros somos unos reprimidos y oprimidos por Dios y la religión porque hacemos las cosas que Dios quiere que hagamos. ¡Claro que sí, porque haciendo lo que Dios quiere nos va bien! Quien tiene temor de Jehová no fornica, no roba y no miente porque el temor de Dios está sobre esa persona.

Proverbios 9:10 dice: “El temor de Jehová es el principio de la sabiduría, y el conocimiento del Santísimo es la inteligencia”. ¿Qué es la sabiduría? Es la capacidad de operar con los conocimientos que uno tiene, sabiamente, es decir, para bien. Si tú tienes temor de Dios te apartas del mal; dejas de pecar y comienzas a hacer las cosas bien. Todos los días tomamos decisiones y todas ellas tienen consecuencias; si las decisiones provienen del temor de Jehová, las consecuencias serán buenas porque son decisiones sabias. Si las decisiones que tomas no están fundamentadas en el temor de Jehová no son sabias y los resultados son malos. Los hombres que no tienen temor de Dios son los que promueven el aborto, el sexo libre, la droga; son los que promueven que el hombre pueda ser mujer y la mujer hombre. Como dice la canción: “Vamos a ver cómo es el reino del revés…”

Hay un porcentaje de gente en el mundo que no será digno de pertenecer al reino que Dios ha profetizado que existirá en la tierra. ¡La tierra verá la gloria de Dios! ¡La tierra será llena del conocimiento de la gloria de Dios así como las aguas cubren el mar! Dios me arrebató de mi tierra, de mi familia, de mi profesión de arquitectura y muchas cosas más, y me dolió porque yo amaba esas cosas pero cuando decidí amar a Dios, Él me introdujo en sus planes y yo he podido ver la gloria de Dios en Uruguay. ¡Miles de personas han sido tocadas por el poder del evangelio! ¡Muchos matrimonios han sido restaurados! ¡Muchos jóvenes han dejado la droga y la delincuencia! ¡Valió la pena! Lo más lindo, más grande y poderoso de todo esto es que la unción que Dios puso sobre mi está sobre Misión Vida para las Naciones. Muchos harán las mismas obras o mayores que las que mi familia y yo hemos hecho. ¡Dios quiere derramar sobre tu vida la misma gracia y la misma unción que tuvo Jesús! ¡Y lo quiere hacer ahora! ¿Para qué esperar más? Muchas veces satanás te ha dicho: “Hoy no se fía, mañana sí. Otro día será”. Revélate y dile: “¡Hoy es mi día! ¡Hoy veré la gloria de Dios! ¡Hoy el Señor me llenará con su Espíritu Santo! ¡Espíritu de sabiduría, de inteligencia, de consejo y de poder!” El Espíritu de conocimiento y de temor de Jehová habitó en Jesús y está deseoso por habitar en ti. Cada cristiano que está consagrado es Cristo caminando en la tierra, es Cristo viendo a través de sus ojos, hablando por su boca y bendiciendo a través de sus manos.

¡Te quedas con esas cosas que amas, o renuncias y Cristo te llena! Proverbios 14:27 dice: “El temor de Jehová es manantial de vida para apartarse de los lazos de la muerte”. ¿No le has dado ya muchas vueltas a Dios? ¿No le has metido suficientes excusas? ¿Sigues enredado con tus cuentas pidiéndole a Dios un mejor trabajo y un mejor sueldo? ¿Sigues pidiendo añadiduras cuando Dios te ha dicho que te daría todas las cosas? ¿Estás dispuesto a perder todo a cambio de la gloria de Dios sobre tu vida y de la llenura del Espíritu del Señor, espíritu de temor de Jehová y de sabiduría? El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; si decides abrazar ese Espíritu y estás dispuesto a perder lo que haya que perder, no te reserves nada y entrégale al Señor tu vida hoy.