TU ORIGEN ES IMPORTANTE - Misión Vida para las Naciones

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TU ORIGEN ES IMPORTANTE

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INTRODUCCIÓN

Quiero hablarte acerca de fundamentos. Lo primero que se hace antes de comenzar a edificar un edificio es poner el fundamento, y esto es muy importante porque si éste no sirve, la estructura que se coloca encima no durará sino que caerá.

Nuestra vida también está edificada sobre fundamentos a los que les llamamos valores o costumbres cristianas pero que en realidad tienen origen en la palabra de Dios o sea que el fundamento es la palabra de Dios. Decimos que el fundamento es el origen de una estructura o edificio por lo tanto es necesario tener una idea clara de cuáles son nuestros orígenes, ya que lo que sabemos de nuestro origen sirve de fundamento a lo que vivimos, hablamos y pensamos. De ahí la interrogante: ¿de dónde vengo? o ¿De dónde viene el ser humano?

Estoy muy molesto porque hay un científico muy reconocido que está imposibilitado en silla de ruedas pero se siente muy orgulloso de sus creencias, y he leído muchas contradicciones en su vida. Hace unos veinte o treinta años atrás él creía que se necesitaba la existencia de Dios para poder explicar la vida, pero pasado el tiempo declaró que no hacía falta Dios, ya que todo había surgido de la nada y mezcló una cantidad de conceptos. Se dice que la famosa Teoría del Big Bang está demostrada, o sea que nosotros provenimos de una explosión, que todo el universo en algún momento estuvo concentrado en un puntito y alrededor estaba la nada. ¡No había absolutamente nada! Pero en ese punto estaba concentrada toda la energía del sol, de las estrellas, la materia de universo y por alguna causa ese puntito explotó aunque no hay más explicación; se dice que tuvo que haber explotado y el universo es el resultado de esa explosión.

Hace años atrás estuvieron estudiando una partícula llamada “La partícula de Dios”, por supuesto que ni se ve pero podía demostrar que la teoría del Big Bang es correcta. Por esta causa construyeron en Europa un colisionador de partículas ubicado a cien metros debajo de la tierra, y que abarca tres países. Quedó demostrado que esa partícula existe pero que la teoría del Big Bang no era como se pensaba, o sea que no se sabe cómo fue la explosión y que habría que elaborar otra teoría del Big Bang, pero que de todos modos, somos el resultado de ese acontecimiento y por lo tanto Dios no existe.

Stephen Hawking, el científico al que me refiero, habló mucho acerca de los agujeros negros. Hay cosas que los científicos especulan, una de ellas es la función que cumplen dichos agujeros; éstos ejercen una atracción extraordinaria, por lo que surge una teoría al respecto, la cual dice que los agujeros negros se tragan todo lo que anda cerca: las estrellas, la energía, la luz, así que todo lo que entra en ellos, desaparece inmediatamente. Esto lo han afirmado por mucho tiempo y por supuesto sin poder demostrarlo; lo dan por cierto porque es una manera de explicar algunos fenómenos que han observado.

Ahora, Stephen Hawking señala que en esos agujeros algunas cosas rebotan y salen de allí. ¡Estoy harto de esa clase de científicos! Este hombre ha cambiado sus teorías una y otra vez pero nadie lo puede contrariar porque es un gran físico y matemático así que si hay algo que declara y está mal no importa, y aunque lo revea tampoco importa ya que es confiable por el hecho de ser un científico. Yo digo que este hombre cambia los fundamentos cada dos por tres de acuerdo a lo que va aconteciendo; él cambia sus teorías dos por tres, entonces lo que se creía antes, ahora ya no sirve y hay que creer lo que dice ahora. Es un ejemplo de lo que es el hombre, que no tiene fundamento firme y estable.

Entonces, la primer diferencia que quiero establecer es que cuando Dios habló del origen del universo, el sol, la luna, las estrellas, el planeta Tierra, etc., Él dio su palabra y hasta ahora no ha cambiado de opinión. ¡Hay una gran diferencia entre lo que declara un científico famoso y lo que ha declarado Dios! ¡El Señor no se contradice! ¡Lo que Él dijo hace miles de años lo sigue afirmando hoy!

LA PALABRA DE DIOS ES INMUTABLE

Las bases que Dios estableció para nosotros son firmes y estables, mientras que las bases o el fundamento que el hombre pone acerca del origen de la vida, van cambiando. Yo creo que tú debes tener una base firme y estable y Jesús afirma en el Nuevo Testamento: “El cielo y la tierra pasarán pero mis palabras no pasarán”. Yo quiero hacer un paralelo y digo que: el cielo y la tierra pasarán, y las teorías de Stephen Hawking también pasarán. Como si fueras a consulta y el doctor te dice que tienes gripe, entonces la próxima vez que lo consultas dice que lo que tienes no es gripe sino un problema pulmonar, pero vas una tercera vez y dice que no se trata de una afección pulmonar sino de un problema en la sangre. ¿Qué haces tú? ¡Te suicidas en defensa propia! Lo que me alegra es que lo que yo le he creído a Dios, lo puedo seguir creyendo y la ciencia me da la razón cada día de que Dios es quien tiene la verdad y Él es el dueño de la verdad.

Ahora, la palabra de Dios declara que Él nos ha creado a su imagen y semejanza y esto es muy importante, ya que no es lo mismo parecerse a Dios que parecerse a un mono, aunque la ciencia dice que somos imagen y semejanza del mono. ¡Saber el origen de algo es muy importante! Por ejemplo, está la marca de autos Audi, que goza de un prestigio importante y cuando viajé a China vi una gran cantidad de vehículos marca Audi por lo que me sorprendió hasta dónde había llegado dicha firma, y me dijeron que esos autos lo fabrican ahí mismo en China. Entonces pensé: “Será Audi, pero es hecho en China”. He viajado también en autos Nissan, otra marca prestigiosa, y cuando vi que el vehículo presentaba problemas, me dijeron que había sido fabricado en México y no en Japón. ¡Es importante el origen! Si te digo que me compré corbatas fabricadas en un pueblo del interior del Uruguay pero también me compré otra de seda italiana, hecha en Italia, ¿cuál es mejor? ¡La de seda italiana! ¡Es importante el origen! ¡Es importante saber de dónde vengo!

Tú tienes una mesa muy bonita hecha con madera de álamo pero quien sabe de madera, entiende que la madera de curupay es mucho mejor. ¡El origen es muy importante! La madre de una joven que habló conmigo le confesó que por culpa de ella el esposo la había dejado cuando había quedado embarazada de ella, y esta chica toda la vida sintió culpa por este hecho y pensaba que no tendría que haber nacido.

Es importante saber el origen. Yo sé que Dios me trajo al mundo y mi origen está en Él. Mi mamá, cuando se enteró que estaba embarazada, esperaba que fuera nena y compró todo de color rosado, pero nací yo. No hay cosa que yo no haya aprendido hacer en cuanto a las tareas de la casa. Cuando nació mi segundo hermano y venían a visitar a mi madre, yo hacía bizcochitos de anís y mi mamá decía: “¡Qué lindo es Jorge! ¡Cómo me ayuda!” ¡Yo aprendí a tejer punto santa clara! Me hice una bufanda y mi madre estaba contentísima porque ella anhelaba una nena. Muchos hombres se preguntan por qué no nacieron mujer. ¡Menos mal que yo me di cuenta que soy hombre! Hoy en día te dicen que aunque hayas nacido hombre puedes elegir ser mujer y viceversa. Cuando hay un error en el origen, tenemos un problema serio. ¡Algo te sobra o algo te falta! Qué lindo es que si naces hombre eres feliz siéndolo aunque hay personas que han estado quince años para decir: “Yo tendré esas cosas ahí pero soy mujer” ¡Tu origen es importante! Nosotros debemos tener una fe bien anclada en un fundamento firme. Si mi origen está en Dios, yo pienso como Dios; si Dios es mi Padre, yo hago las cosas que Él hace y digo lo que dice. ¡Su naturaleza está en mí! Mi naturaleza es como la de mi Padre y no es lo mismo que yo diga que mi papá es un chimpancé.

Las escuelas y universidades llevan más de ciento cincuenta años enseñando que descendemos del mono, entonces tendríamos que declarar que hacemos monadas como nuestro padre el mono. Hay unas contradicciones extraordinarias ya que se dice que el noventa y siete por ciento de caracteres del ADN del chimpancé son iguales al ser humano y sólo hay una diferencia del tres por ciento, pero yo me pregunto: ¿Cómo puede ser que con un tres por ciento pudimos llegar a la luna, a Marte, hemos construido transatlánticos y atravesamos los océanos? También hemos hecho canciones, en cambio los monos siguen comiendo bananas arriba de los árboles. Leí también, que tenemos trescientos millones o treinta millones de caracteres diferentes con el chimpancé; si fuera un tres por ciento es insignificante pero si son treinta o trescientos millones de caracteres entre mi ADN y el de mono, es una gran diferencia.

Tú tienes que estar seguro de tu origen porque eso le da fundamento a tu existencia, le da fundamento a la construcción de tu vida. Si crees que tu papá y tu mamá no te quisieron tener, te sientes un desgraciado o una desgraciada porque no te aman y preguntas para qué sirve la vida o por qué has venido al mundo, entonces te sientes responsable de haber trastornado la relación entre tus padres, pero si crees que tu origen está en Dios entonces tu vida está bien fundamentada. Cuando el Señor estaba ideando un pastor para Uruguay antes de la creación del mundo, pensó en mí y dijo: “Voy a crear a Jorge Márquez y lo voy a enviar a Uruguay”. Dios es un Dios de procesos y de propósitos, Él planificó todo.

Yo he planificado varias veces ir a San Juan mi tierra natal, entonces tengo que salir del punto donde estoy, siguiendo las rutas correspondientes y me enfoco para llegar a donde quiero. Dios no ha hecho al ser humano en una máquina y a medida que va creando hombres y mujeres los va tirando sobre el planeta, entonces mira y se rasca la cabeza diciendo: “¿Ahora qué hago con estos?” Dios, primero tiene un plan y luego crea al ser humano para completar ese plan. El mono nace de una mona y muere siendo mono, pero Dios nos ha incluido en proyectos eternos y como Él es eterno ha puesto eternidad en nosotros. Digamos que los planes de Dios comienzan una eternidad antes de que yo nazca y esos planes que tiene conmigo terminan una eternidad después de que yo me muera, entonces comienzo a entender que mi existencia tiene valor y que es importante que yo haya venido al mundo. ¡Es imprescindible que encuentre el propósito de Dios para mi vida y que sepa cuál es mi origen! Si tu mamá y tu papá te dijeron que viniste al mundo por casualidad ya que no te esperaban, diles que no es así y que tú naciste porque Dios así lo dispuso. ¡Dios dispone que tú existas! ¿Cuántas mujeres quieren tener hijos pero no quedan embarazadas? ¿Y cuántas deciden que no van a tener más hijos y sin embargo siguen engendrando? Mi hermano y su esposa tuvieron cuatro hijos y dijeron que ya no iban a tener más, entonces mi cuñada se colocó un DIU, un dispositivo anticonceptivo para no quedar embarazada y a pesar del DIU quedó embarazada y de mellizos. ¡Cuando nacieron, revolearon el DIU que no sirvió para nada! La vida no es un azar como declaran los científicos; la existencia del hombre no es un azar, tú existes porque venciste. Millones de espermatozoides lucharon para alcanzar el óvulo y el que ganó te trajo al mundo a ti. ¡Tú existencia es importante! No era lo mismo un espermatozoide que otro porque si el óvulo de tu mamá hubiera sido fecundado por otro esperma, tal vez hubieras salido más feo o más fea. ¡El origen es muy importante!

Te daré otro ejemplo para que entiendas la importancia del origen: Un muchacho se pone de novio y le cuenta a su mamá que está enamorado, ella comienza a indagar quién es esa mujer, entonces él le dice que la conoce ,que es hija de fulana de tal a lo que la madre le dice: “¡Ah hijo! La madre es una mugrienta, el padre también, ¡no te vas a casar con una mugrienta!” ¡Mi mamá le dijo eso a mi hermano! ¡Y él se casó con la mugrienta! Pero le dijo: “Mamá no me hables mal de la mujer que amo. Yo la quiero con mugre y todo”. Lo que quiero decir con esto es que las madres quieren saber el origen de la persona que se relacione con su hijo o con su hija porque es muy importante.   

DIOS PREPARÓ TODO, PARA RECIBIRTE EN LA TIERRA 

Debes saber que Dios hizo el universo, las montañas, los valles, las estrellas, el sol y la luna, y preparó la Tierra para que sea un buen lugar donde habitemos, porque Él tiene proyectos. Génesis es el primer libro de la Biblia y significa origen así que tú eliges si tu origen está regido por la teoría de la evolución o por lo que Dios dice en su palabra. Leemos en Génesis 1:1: “En el principio creó Dios los cielos y la tierra”. En otra versión señala que Dios creo la tierra y los cielos, dándole preeminencia a la tierra sobre otros astros. Génesis 1:2 afirma: “Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas”. El término para desordenada y vacía significa “desolada” o “en caos”. La luna está desolada, lo mismo que el planeta Marte. ¡Los científicos andan buscando si hay algún planeta que tenga características como la Tierra para ver si hay posibilidad de encontrar aunque sea bacterias microscópicas! En el principio, la Tierra estaba como la luna, como el planeta Marte o Júpiter, desordenada y vacía. “…y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas”. Que el Espíritu de Dios se movía significa que revoloteaba o anidaba sobre la faz de las aguas; estaba generando algo en medio de la desolación. Continua diciendo Génesis 1:3 al 5: “Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas. Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y la mañana un día”. ¡Donde hay luz no puede haber tinieblas! La tierra estaba en caos, en desolación y oscuridad; reinaba la oscuridad, pero Dios hizo la luz. Génesis 1:6 al 10 dice: “Luego dijo Dios: Haya expansión en medio de las aguas, y separe las aguas de las aguas. E hizo Dios la expansión, y separó las aguas que estaban debajo de la expansión, de las aguas que estaban sobre la expansión. Y fue así. Y llamó Dios a la expansión Cielos. Y fue la tarde y la mañana el día segundo. Dijo también Dios: Júntense las aguas que están debajo de los cielos en un lugar, y descúbrase lo seco. Y fue así. Y llamó Dios a lo seco Tierra, y a la reunión de las aguas llamó Mares. Y vio Dios que era bueno”. ¿Cuánta agua hay arriba de la expansión? ¡Pregúntales a las personas inundadas cuando llueve mucho! ¡Cuando Dios abre las fuentes de las aguas de arriba y no cierra la canilla, aquí abajo no sabemos qué hacer! De eso también sabía bastante Noé. Particularmente creo que hay más agua arriba que abajo. Génesis 1: 11 al 13 sigue diciendo: “Después dijo Dios: Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol de fruto que dé fruto según su género, que su semilla esté en él, sobre la tierra. Y fue así. Produjo, pues, la tierra hierba verde, hierba que da semilla según su naturaleza, y árbol que da fruto, cuya semilla está en él, según su género. Y vio Dios que era bueno. Y fue la tarde y la mañana el día tercero”. Cada día es una etapa y no voy a discutir si cada día fue de veinticuatro horas, de veinticuatro años o veinticuatro millones de años porque eso no me interesa ahora, aunque creo que eran días de veinticuatro horas. Pero esto no obedece a una explosión. Esto es la descripción de alguien que está preparando un lugar especial y ¡vaya que es un lugar especial! Cuántas veces hemos oído de algún meteorito que podría impactar la Tierra y causar daños impresionantes pero nuestra atmósfera protege la tierra por lo que si un meteorito choca contra ella estalla en mil pedazos porque para poder entrar tiene que hacerlo a una velocidad y ángulo específicos. La tierra es un lugar muy especial preparado para la existencia del ser humano; preparado para que haya abundancia de vida.

Cuando mi mamá estaba embarazada de mí, esperaba que sea nena y preparó un ajuar todo rosado y cuando nací los obligué a comprar todo de color celeste. Así como prepara una madre el ajuar del bebé, Dios preparó el planeta Tierra para que tú y yo lo habitemos. La Biblia dice que Dios hizo que la tierra produzca hierba verde que de semilla y árbol que diera fruto cuya semilla está en ese fruto. Todo árbol tiene fruto y todo fruto tiene semilla según su género. La ciencia nos enseña que un mono puede llegar a ser un ser humano, pero Dios hizo las cosas según su género. Una semilla de eucaliptus dará siempre eucaliptus, una de pino dará pino; las chanchas tienen chanchitos y los monos tienen monitos. Se dice que hubieron miles de millones de años de evolución para que el mono llegara a ser un ser humano, pero se han encontrado fósiles de monos y de seres humanos. ¡No existen fósiles intermedios! Puedes tener un fósil de mono que se parece al hombre pero estudias el ADN y arroja como resultado que es un mono y viceversa. ¡No existe un ADN intermedio entre el mono y el hombre porque Dios hizo todas las cosas según su género! Si se experimenta con los perros pueden salir especies canina chiquita, grande, peludo, sin pelo, de todos colores, pero si los miras no te confundes porque ves un perro. ¡Ese es su género! ¿Has visto un perro decir cuac?

Génesis 1: 14 y 15 dice: “Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días y años, y sean por lumbreras en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra. Y fue así”. Los astros sirven de señales, o sea que anuncian cosas, por ejemplo cuando culmina un año; sirven para elaborar el calendario y otras cosas más. En el Salmo 19:1 señala la palabra de Dios: “Los cielos cuentan la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus manos”. Hay astrología que está ligada al ocultismo pero hay conocimiento de la historia de la humanidad y de los planes de Dios que está escrita en el cielo. Los reyes magos siguieron una estrella que los guió hasta donde estaba el niño Jesús, por esa estrella sabían que nacería el rey de los judíos. Dios ha hecho las estrellas y otros astros para dar señales, por eso, cuando ocurre el fenómeno de las cuatro lunas de sangre, todos los científicos y religiosos opinan acerca de ello, porque son señales. Las lumbreras en el cielo dan señales, por eso sabemos cuándo es Navidad y Semana Santa, porque esas cosas están determinadas por los movimientos de los astros. Génesis 1:16 al 21 continúa diciendo: “E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas. Y las puso Dios en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra, y para señorear en el día y en la noche, y para separar la luz de las tinieblas. Y vio Dios que era bueno. Y fue la tarde y la mañana el día cuarto. Dijo Dios: Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen sobre la tierra, en la abierta expansión de los cielos. Y creó Dios los grandes monstruos marinos, y todo ser viviente que se mueve, que las aguas produjeron según su género, y toda ave alada según su especie. Y vio Dios que era bueno”. ¿Te imaginas un ave que mira sus alas y se pregunta para qué servirán? Si un animal tiene alas, entonces debe volar. ¿Qué significa eso? ¡Que Dios hizo todo con propósito! A otros animales los creo para que se arrastraran, otros con condiciones para que corran, etc. Según el diseño, es la función. Si fuiste diseñada para ser mujer hay una función que es propia de las damas y por más que te operes no serás hombre. Si nasciste hombre eres hombre. ¡Hay designio y propósito en ello! ¡Dios tiene un plan contigo! Lo peor que le puede pasar al ser humano es morirse y no enterarse nunca para qué vino al mundo.

Yo sé que no nací en el día equivocado sino cuando Dios quiso que naciera, en el lugar que Él estableció. ¡No ando a contramano! ¡No me siento como Adán en el día de la madre! ¡Sé que Dios tiene un propósito conmigo! ¡El Señor me trajo al mundo para ser de bendición y sé que lo soy! Yo no fui a Haití por casualidad sino porque Dios quería que yo fuera. Si no nací de Dios entonces ¿qué sentido tendría mi existencia? ¿Para qué ser bueno? ¡No tendría sentido ni siquiera ser bueno! Si no fue Dios que me trajo al mundo y si no preparó el planeta Tierra para mí; si hubieran nacido en el sol, ¡hubiera durado menos que un pelado en la nieve! Yo sé que Dios me quería como pastor en Uruguay y sé que Él pensó en mí desde antes de la fundación del mundo. También sé que el trabajo que me encomendó en Uruguay es eterno y después de mi se levantarán generaciones de creyentes que serán bendición como yo lo soy. Cuando yo ya no esté, habrán muchos que recibieron los desafíos de Dios que yo he abrazado.

Génesis 1:22 dice: “Y Dios los bendijo, diciendo: Fructificad y multiplicaos, y llenad las aguas en los mares, y multiplíquense las aves en la tierra”. Dios dio una orden; debíamos multiplicarnos y llenar la tierra, fue una orden que nadie ha podido frenar ni con el aborto, ni con fabricar pestes. Hay quienes pretenden bajar el número de la población mundial porque es un problema pero Dios decretó que debíamos multiplicarnos y nadie puede parar eso. ¡Hasta los que no quieren tener hijos los tienen porque Dios lo dijo!

Génesis 1: 24 al 26 sigue diciendo: “Luego dijo Dios: Produzca la tierra seres vivientes según su género, bestias y serpientes y animales de la tierra según su especie. Y fue así. E hizo Dios animales de la tierra según su género, y ganado según su género, y todo animal que se arrastra sobre la tierra según su especie. Y vio Dios que era bueno. Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra”.

¡Qué lío sería que las vacas dejaran de tener crías de su especie! ¡No podríamos comer más asado! ¡Padre te pido que las vacas nunca dejen de dar carne! En una oportunidad visité Mundo Marino donde presentaban un espectáculo con ballenas u orcas asesinas adiestradas; el entrenador se sube sobre ella y este animal se hunde con él, cuando sale el entrenador sale en la punta de la nariz de la ballena. ¡Es algo extraordinario! Eso es en cumplimiento de lo que Dios le ha dicho al hombre cuando le dio autoridad para que éste señoree en lo peces y las bestias. ¡Hasta las víboras más venenosas obedecen al encantador! Toda naturaleza de bestias y animales ha sido gobernada por el hombre o sea que la palabra de Dios se cumple. No hay animal que el hombre no haya podido dominar. No sé tú pero yo me parezco a Dios, pienso como Él y no como el chimpancé, también hablo como Dios y no como los monos. Tengo sentimientos como los tiene Dios y siento como Él siente y lo más lindo es que yo amo como Dios ama.

Recuerda que el origen es importante, por eso Dios puso en la Biblia un libro llamado Génesis. La gente que está en contra de Dios, se enoja porque creemos lo que dice en su palabra pero hasta aquí, la palabra de Dios no ha mudado, no ha cambiado y el planeta Tierra no existe por azar. Andan buscando un planeta que tenga las mismas condiciones propicias para que haya vida y no encuentran. Si hubiera algún planeta así, seguramente a los habitantes de ese planeta los creó Dios.

CONCLUSIÓN

La Biblia habla de los planes que Dios tiene con nosotros, planes de vivir y reinar con nosotros, y de enjugar toda lágrima. La palabra de Dios señala que nosotros vamos a juzgar a los ángeles y ellos estarán bajo nuestra autoridad. ¡Dios no ha cambiado sus planes! ¡El Señor no ha cambiado el origen ni los fundamentos! Tú puedes estar tranquilo o tranquila de que mientras haya planeta, el sol siempre saldrá. Esto me da paz y me hace entender que mi vida tiene significado y propósito porque si yo hubiera nacido de una explosión y hubiera surgido de la nada entonces no tendría ningún sentido que pretenda ser una buena persona ya que voy a terminar en un cajón comido por gusanos; tampoco tendría ningún sentido el bien y el mal. ¿Para qué ser bueno o malo si no hay propósito en nuestra existencia ya que nuestra vida termina cuando dejamos de respirar? Pero Dios ha dicho que nosotros tenemos eternidad y que nuestra vida trasciende los límites del tiempo, que el tiempo no podrá ponernos límites y los planes de Dios continúan más allá de nuestra muerte.

Aunque yo estuviese equivocado y aunque todo lo que dice la Biblia fuera mentira, vale la pena vivir bajo estas premisas y este fundamento. ¡Pero no es mentira! Jesús declaró: “El cielo y la tierra pasarán pero mis palabras no pasarán”. Y yo diría: “El cielo y la tierra pasarán, y las palabras de Stephen Hawking también”.

Lo que me duele es que hay creyentes que viven como si no hubiese eternidad y como di Dios no existiese; sólo pueden ver lo que hay delante de sus ojos, pero no tienen adiestrado los ojos de la fe para ver los planes de Dios. ¡Viven como ciegos a las verdades de Dios esperando que algo suceda! El Señor te ha hecho a su imagen y semejanza para que así cómo Él dijo sea la luz y fue la luz, tú produzcas circunstancias y no que las circunstancias te produzcan a ti. Algunos están esperando que suceda algo, en cambio hay quienes hacen que algo suceda. Dios te ha puesto en el mundo para que tú obres en su nombre y le des sentido a la historia de la humanidad. ¿Últimamente no te has estado llevando bien con Dios? ¿Estás enojado con el Señor? ¿Estás enojada?

Aun así dile: “Señor, tú eres mi Padre y yo creo en ti. Quiero restaurar mi relación contigo y dejar de cuestionarte. Eres muy grande Señor para que yo te cuestione y es muy grande tu amor hacia mí. Quiero tener una relación de amistad contigo, Dios”. Tu angustia, tu soledad e impotencia han estado afligiendo tu vida y le atribuiste a Dios alguna injusticia o algo que no entiendes. Dile: “Señor, reconozco que eres Dios. Reconozco que eres el único Dios que existe, qué tu palabra es verdad, quiero pararme en el fundamento firme y caminar en tu palabra, Señor”.

Jesús dijo en Lucas 6: “Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca. Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca. Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena; y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina”. No se trata de que tengas ideas extraordinarias porque Dios ya las tiene antes que tú. No hay otro fundamento más que éste, la palabra que Dios ha dado. Cuando hables, hazlo conforme a la palabra de Dios; cuando opines, opina conforme a la palabra de Dios. Él no es como tú piensas sino como Él dice que es. Dios no actúa como tú sientes o piensas que debe actuar, sino que siente y piensa tal cual ha dicho en su palabra. ¡Renuncia a ti mismo y abraza al Señor en esta hora!

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