Estamos asistiendo a una etapa de la historia de la humanidad, en que los hombres están buscando el camino para vivir mejor; estuve leyendo esta mañana la exposición que dos constitucionalistas hicieron ante la Comisión de Salud del Senado de la República respecto del Proyecto de Ley de Defensa de la Salud Reproductiva; se trata de dos conocidos e importantes constitucionalistas, es decir, personas que han dedicado sus vidas a estudiar la constitución y las leyes que están relacionadas con ellas. Cada vez que se quiere promulgar una ley, se busca a los constitucionalistas para ver si el texto que se quiere promulgar está de acuerdo con los principios constituciones. Estuve leyendo la exposición que hicieron acerca de la mencionada ley y ambos, invocando los mismos artículos de la constitución, ven las cosas totalmente distintas: Uno ve la cosa de una manera y otro la ve exactamente al revés. Yo me pregunto: ¿Cómo puede ser que dos personas que han dedicado su vida a estudiar la constitución y el derecho comparado, pueden ver la cosa totalmente distinta? Y alli es cuando invoco la palabra de Dios y digo: “Lámpara es a mis pies tu palabra, Y lumbrera a mi camino”. (Salmos 119:105). (más…)
Hay un pasaje de la Biblia que está en el Salmo 103, versículos 17 y 18 el que quiero compartirlo con ustedes. Una de mis hijas lo imprimió en una hoja bonita y lo pegó en la puerta de mi guardarropas: “Mas la misericordia de Jehová es desde la eternidad y hasta la eternidad sobre los que le temen, Y su justicia sobre los hijos de los hijos; 18 Sobre los que guardan su pacto, Y los que se acuerdan de sus mandamientos para ponerlos por obra”.
Si tú estás haciendo una buena vida, honrando a Dios, estás proveyendo no solo para ti, sino para tus hijos y para los hijos de tus hijos. ¡La vida cristiana tiene premio! Y ese premio perdura en el tiempo. (más…)
Hoy hablaremos acerca de la historia de Abigail y Nabal. Había un hombre que se llamaba Nabal, muy rico, que tenía muchas ovejas y asnos y David era una especie de caudillo, “merodeador” que comía él y toda su gente de lo podían conseguir. Pero tenía David algo muy claro: El no podía tocar al pueblo de Dios y Nabal era de Israel; David era una especie de escudo y defensor de determinado territorio que protegía a sus habitantes de bandas de asaltantes; estos merodeadores eran como una especie de ejército que salvaguardaba ciertos territorios. Entonces Nabal estaba protegido por David y su gente y nunca le faltó nada mientras David estuvo cerca. Un buen día, David necesita darle de comer a su gente y le manda pedir a Nabal comida y aquí está la enseñanza de la historia que quiero compartir con ustedes.
1ª Samuel 25:7: “7He sabido que tienes esquiladores. Ahora, tus pastores han estado con nosotros; no les tratamos mal, ni les faltó nada en todo el tiempo que han estado en Carmel. 8Pregunta a tus criados, y ellos te lo dirán. Hallen, por tanto, estos jóvenes gracia en tus ojos, porque hemos venido en buen día; te ruego que des lo que tuvieres a mano a tus siervos, y a tu hijo David. (más…)
Ezequiel 33:31-33: “Y vendrán a ti como viene el pueblo, y estarán delante de ti como pueblo mío, y oirán tus palabras, y no las pondrán por obra; antes hacen halagos con sus bocas, y el corazón de ellos anda en pos de su avaricia. 32Y he aquí que tú eres a ellos como cantor de amores, hermoso de voz y que canta bien; y oirán tus palabras, pero no las pondrán por obra. 33Pero cuando ello viniere (y viene ya), sabrán que hubo profeta entre ellos”.
No sólo es necesario venir a la iglesia y escuchar el mensaje solamente, quien escucha palabra de Dios y no la pone por obra, es un necio. Dios podría hacer tantas cosas con nosotros, pero hay un mal, que yo llamaría una especie de ceguera espiritual, que a veces nos permite deleitarnos en el consejo de Dios solamente pero no obedecerlo. (más…)
Deuteronomio 1:38: “Josué hijo de Nun, el cual te sirve, él entrará allá; anímale, porque él la hará heredar a Israel”. Este pasaje se refiere al momento en que Moisés estaba terminando su ministerio; durante 40 años Moisés fue el líder de Israel, lo condujo por medio del desierto hacia la tierra prometida y cuando llegó, Dios le dijo: “No entrarás a ella pero te permitiré contemplarla; toma a Josué, hijo de Nun, el joven que ha estado a tu lado durante todos estos años sirviéndote, él hará heredar la tierra a los hijos de Israel”. Este es un versículo clave, se refiere a un traspaso generacional; es el momento en que Moisés estaba pasando la antorcha a Josué. (más…)
Dios anhela hacer una obra especial en nuestras vidas: Santificar “todo” nuestro ser y hacer de él un instrumento eficaz para su reino. Leamos 1ª Tesalonicenses capítulo 5, versículo 23: “Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo. 24Fiel es el que os llama, el cual también lo hará”.
¿Qué quiere hacer Dios? Santificar todo nuestro ser: Espíritu, alma y cuerpo. Dios pretende santificar todo nuestro ser, es decir, “apartarlo” para sí. Santo no es una persona que tiene una aureola y una cara de estúpido, santo es una persona aparatada para Dios en sus pensamientos, en sus sentimientos, en sus emociones, en su cuerpo y en su espíritu. (más…)
Hoy compartiremos un tema importantísimo, de vida o muerte para cada uno de nosotros: Tenemos que aprender a valorar y cuidar nuestra fe, tenemos que esmerarnos en retener nuestra fe.
Muchas veces he dicho que si yo fuera diablo, trataría de robar la fe a los creyentes y haciendo eso, los hundiría y los destrozaría. ¿Por qué? ¡Porque es imposible subsistir sin fe! Dice la Biblia que “…el justo por su fe vivirá” (Habacuc 2:4). Cuando se menciona un pasaje de la palabra de Dios en el templo o cuando tú la lees, no son meramente palabras las que están retumbando, sino que es la espada de Dios y cuando tú la crees, esa palabra tiene poder para actuar en tu vida. Pero recuerda: El justo por la fe vivirá. Tu vida depende de la fe, que vivas o mueras, que seas salvo o condenado, por lo tanto tienes que guardar y cuidar tu fe con empeño. Dice la Biblia que la fe es “…mucho más preciosa que el oro” (1ª Pedro 1:7). ¡Es más preciosa que todo el oro que puedas acumular!
En el libro de Mateo se relata la historia de los magos de oriente, historia que estamos recordando en esta semana. Dice la Biblia que vinieron de oriente siguiendo una estrella y se encontraron con Herodes, el rey de Judea. Muy inocentemente los magos le dijeron a éste que habían venido a adorar al príncipe que había nacido. “Hemos viajado hace muchos días para verlo. ¿Ud. sabe donde está?”, le preguntaron los magos a Herodes. “¡Espere que le averiguo!” Entones Herodes manda preguntar qué principe se espera en Israel y dónde tendría que nacer. Le contestan: “El que estamos esperando es el Mesías y va a nacer en Belén” Entonces Herodes les dice a los reyes magos: “¡Nacerá en Belén! Así que averigüen bien donde está y luego vuelvan a avisarme así yo también iré a adorarle”. Pero fueron advertidos de no regresar ya que Herodes pensaba que cualquier otro príncipe que existiera debía ser muerto pues él se consideraba el único rey. Entonces se volvieron por otro camino distinto del que habían venido y le ofrecieron a Jesús, oro incienso y mirra y le adoraron. (más…)
Hoy quiero tratar el tema de la bendición y la prosperidad desde el punto de vista de Dios; en realidad la bendición y la prosperidad son cosas que Dios promete a quienes le buscan y le aman. Toda la Biblia está llena de promesas “condicionales”.
Éxodo 23:25 tiene una promesa “condicional”: 5Mas a Jehová vuestro Dios serviréis, y él bendecirá tu pan y tus aguas; y yo quitaré toda enfermedad de en medio de ti. 26 No habrá mujer que aborte, ni estéril en tu tierra; y yo completaré el número de tus días. 27Yo enviaré mi terror delante de ti, y consternaré a todo pueblo donde entres, y te daré la cerviz de todos tus enemigos”. (más…)
Hoy hablaremos de una historia maravillosa e inspiradora: La historia de José. Leamos Génesis, Capítulo 37:1
“1Jacob habitó en la tierra donde había vivido su padre, en la tierra de Canaán. 2Esta es la historia de la familia de Jacob: José tenía diecisiete años y apacentaba las ovejas con sus hermanos; el joven estaba con los hijos de Bilha y con los hijos de Zilpa, mujeres de su padre; e informaba José a su padre de la mala fama de ellos. 3Israel amaba a José más que a todos sus hijos, porque lo había tenido en su vejez; y le hizo una túnica de diversos colores. 4Al ver sus hermanos que su padre lo amaba más que a todos ellos, lo aborrecían y no podían hablarle pacíficamente. 5Tuvo José un sueño y lo contó a sus hermanos, y ellos llegaron a aborrecerlo más todavía. 6Él les dijo: Oíd ahora este sueño que he tenido: 7estábamos atando manojos en medio del campo, y mi manojo se levantaba y se quedaba derecho, y vuestros manojos estaban alrededor y se inclinaban ante el mío. (más…)