DIOS ANHELA TENER COMUNIÓN CONTIGO - Misión Vida para las Naciones

Av. 8 de octubre 2335

Montevideo

WhatsApp:(+598) 095333330

MENSAJES DEL CIELO

DIOS ANHELA TENER COMUNIÓN CONTIGO

Nos estamos preparando para Pentecostés, una celebración a la que no le hemos dado un lugar importante. Quizás le hemos dado importancia a la Navidad, a la Pascua, pero no al Pentecostés que es un acontecimiento muy importante; capaz que su ausencia hace que le restemos importancia, pero si le damos la importancia debida al Espíritu Santo, él se manifestará sobre nuestras vidas. Dios trabaja con nuestros deseos, si tu tienes deseos, él te los concederá. Dice la palabra de Dios, que si un hijo quiere pan, su padre no le dará una piedra, y cuánto más no dará Dios el Espíritu Santo a aquellos que se lo piden.

Observo creyentes estériles y a veces me siento culpable de no haberlos atendido; muchos se ofenden y se van de la iglesia diciendo: “El pastor está muy ocupado”. ¿Por qué sucede esto? Muchos enfrentan situaciones conflictivas y al no tener un pastor que les dé un consejo, se sienten solos y frustrados. ¡Tendríamos que tener un pastor para cada oveja! Pero Dios dijo en Joel 2:28: “Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones”.

 DIOS HA PLANEADO SER TU AMIGO

De eso hablaremos hoy: Del derramamiento del Espíritu Santo sobre toda carne. Si tienes que tomar una decisión, podrás ir directamente a Dios a pedirle consejo; hay un jardín que Dios plantó dentro de tu corazón y donde se pasea él. Dios habla por su espíritu al espíritu del hombre.

Estuve hace poco en Miami donde me encontré con un joven que se fue de nuestra iglesia; “Tavito” siempre me miraba de lejos, yo no sabía qué le sucedía y él, cada vez que me veía, pensaba: “Allí va el pastor, él nunca me abraza, no me presta atención como lo hace con otros…” Este chico, cuando nació, fue regalado por sus padres a unos tíos, pero cuando tenía 6 años, se murió el tío y a los 12 se murió la tía; vivió por lo tanto, rodando sin tener alguien con quien relacionarse. Cuando llegó a la iglesia, quiso acercarse al pastor, pero sin éxito. El pastor para él representaba la figura paterna que nunca tuvo. Conclusión, terminó alejándose de Dios y de la iglesia. Se puso de novio con una chica que no conocía a Dios, y se fue luego a Miami donde comenzó un calvario, una lucha entre seguir a Dios o quedarse con su novia. Un día, la chica regresa a Montevideo y él queda solo… con el dolor en su corazón de que no pudo hablar con el pastor, quien “nunca lo tuvo en cuenta”. Posteriormente se entera que voy a Miami, y se dice: “¡Buscaré al pastor!” Me busca todo el día, pero al llegar a la noche, sin encontrarme, se enoja con Dios y decide: “¡No lo busco más!” Cuando dice eso, ¡se da vuelta y se encuentra conmigo! Aquí nunca tuve tiempo para él, pero en Miami, la única oveja que tenia era “Tavito”. Me dice: “Me parece mentira estar con Ud”. Luego de hablar conmigo, se dio cuenta que yo no tenía nada en contra de él, sólo había una barrera afectiva entre los dos. Lo abracé y oré por él… al rato me dice: “¿Me puede abrazar de nuevo?” ¡Lo abracé como cuatro veces! A veces las barreras que tenemos para relacionarnos con Dios, son barreras de humo, barreras psicológicas. Yo me vine abrumado pensando: “¡Cuántos “Tavitos” habrá en la iglesia! Y cuántos se habrán ido de la iglesia…” Dios me dio una respuesta: “Lo que sucede es que dependen demasiado de ti y no me adoptan a mí como Padre; no se dan cuenta que yo habito en sus corazones y que si ellos me buscan de verdad, oirán mi voz, no la del pastor”. Tengo buenas noticias para ti: Dios va contigo en el ómnibus, Dios está contigo en tu casa, en el trabajo, en todos lados. ¡Te puede faltar el pastor pero la presencia del Espíritu Santo estará siempre contigo!

 ¿TIENES LÍNEA DIRECTA CON DIOS?

No es que el pastor no sirva pero todo ser humano tiene una necesidad de conocer a Dios de un modo íntimo, de relacionarse con él, pero Dios no puede hablar con aquellos que tienen cosas demasiado importantes para atender como para no prestarle atención a él. Estamos acostumbrados a dejar a Dios con la palabra en la boca: Oramos apurados, comemos apurados, venimos a la iglesia apurados y nos queremos ir apurados. Los diálogos con Dios no son diálogos sino monólogos. Mi pregunta es: ¿Dios es un Padre real para ti? ¿Es un amigo? ¿Por qué no lo dejas hablar? Nosotros tenemos espíritu, alma y cuerpo. Dios establece contacto en nuestro espíritu, por lo tanto su voz será oída en nuestro espíritu. Circunstancialmente, en determinadas ocasiones que Dios determina, podrás oír su voz audiblemente, como la oyó Samuel. Pero él habla en el corazón.

Hay dos clases de creyentes: Algunos todo el día andan diciendo: “Dios me dijo”. Parece que tienen línea directa con el Pentágono. Escuchan un mosquito que pasa, y dicen: “Oh, Dios me habló”. Y hay otros que nunca escuchan a Dios. Más bien, nosotros estamos de este último lado y con razón buscamos tanto al pastor. Dios me dijo: “La gente prefiere buscarte a ti y no a mí”.¿Qué prefieres? ¿Hablar con Dios o con el pastor? ¡Mil veces prefiero hablar con Dios! Pero, ¿cuánto tiempo le dedicas a hablar con Dios? ¿Cuánto tiempo dedicas a limpiar tu jardín, al lugar donde él se pasea y habla contigo? Hay un lugar donde Dios habla; El no habla a través de los sentidos del cuerpo ni a través del alma, no lo hace a través de los sentimientos, de la mente y voluntad del hombre, Dios le ha puesto al hombre un espíritu y Dios es espíritu y los que le adoran, es necesario que le adoren en espíritu y en verdad. (Juan 4:23). En otras palabras, este pasaje te está enseñando que Dios habla con los que le adoran en espíritu y en verdad. En espíritu significa, hablar por el espíritu, ayunar, orar, estudiar su palabra, buscarle de todo corazón. Toda relación se profundiza en la comunión, yo no puedo mejorar mi relación con mi esposa si no le dedico más tiempo a ella y lo mismo ocurre con mi relación con Dios. ¡De lejos no se mejoran las relaciones! Lo cierto es que Dios anhela hablar con nosotros. Cuando él estaba solito, dijo: “Crearé estrellas, cielos, ángeles y haré al hombre a mi imagen y semejanza para que fructifique y se enseñoree de lo que yo haga”. Dios habla en el espíritu. El libro de Apocalipsis nació porque Dios habló. Apocalipsis 1:10 dice: Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor, y oí detrás de mí una gran voz como de trompeta,”. Así nació el Apocalipsis: “Yo estaba en el Espíritu… y oí una voz”. Cuando tu estás en el Espíritu, recibes conocimiento y revelación de Dios pero cuando no estás en el Espíritu, buscas al pastor.

 PENTECOSTÉS EN EL ANTIGUO Y NUEVO TESTAMENTO

La fiesta de Pentecostés la celebraron los judíos. Cuando cruzaron el mar Rojo, a los 50 días de haberlo cruzado, hubo un Pentecostés en el monte Sinaí, descendió la presencia soberana y estruendosa de Dios; hubo truenos, relámpagos y fue manifestada su gloria. Allí Dios entregó al pueblo de Israel la ley, la Torah y manifestó a través de ella, la clase de Dios que es; su ética, su santidad, su moral, la conocemos a través de la ley. Y fue ordenado al pueblo de Israel que celebrase el Pentecostés cada año. El cordero de Dios que quita el pecado del mundo, Jesús, murió y resucitó en una Pascua, y a los 50 días, también hubo truenos y relámpagos del cielo. Hay una misma palabra que se usa tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento: “Estruendo”. ¡Hubo un estruendo!  Allí el Espíritu Santo repartió lenguas de fuego sobre los creyentes y comenzaron a hablar en nuevas lenguas y todos les entendían porque hablaban en sus lenguas nativas. En el Antiguo Testamento, la ley fue escrita en tablas, pero en el Nuevo Testamento, dice la Biblia que el Espíritu Santo escribe la ley de Dios en nuestros corazones. Leamos Jeremias 31:33: “Pero este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice Jehová: Daré mi ley en su mente, y la escribiré en su corazón; y yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por pueblo”.  ¡La ley de Dios está escrita en tu corazón! 2º Corintios 3:3: “siendo manifiesto que sois carta de Cristo expedida por nosotros, escrita no con tinta, sino con el Espíritu del Dios vivo; no en tablas de piedra, sino en tablas de carne del corazón”. En el Antiguo Testamento los israelitas recibieron la “letra” de la ley pero nosotros recibimos el “espíritu” de la ley. La letra muestra la justicia de Dios, pero el espíritu muestra la gracia de Dios. Por los relámpagos y el fuego que cayó en el Monte Sinaí, dice la Biblia que murieron 3000 personas, pero cuando el estruendo cayó en el Nuevo Testamento, dice la Biblia que 3000 personas se entregaron a Cristo cuando Pedro predicó. ¡3000 personas vivieron! La letra mata pero el espíritu vivifica. Dios quiere hacerte entender que él ha hecho cosas increíbles por ti, tu no necesitas contratar un pastor y tenerlo todos los días en tu casa, tu necesitas tener comunión con el Espíritu Santo.

Dice Jesús en Juan 16:7: “Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré”. Jesús estaba tratando de explicarle a los discípulos, y a nosotros hoy, que era más importante que él se fuese para que venga luego el Espíritu Santo, porque si él no se iba, le iba a suceder como al pastor: ¡No tendría tiempo para atender a todos! En cambio el Espíritu Santo habitará en los corazones de aquellos que reciban a Jesús como Señor y salvador de sus vidas y él los guiará a toda verdad y les hará saber todas las cosas. El Espíritu Santo es consolador; me da tristeza ver a gente que me dice que hace tres años está esperando por mí para pedirme consejo por un problema grave que tiene. ¿No te encontraste en estos tres años con el Espíritu Santo que es consolador? El Espíritu Santo nos guiará a toda verdad, no necesitamos esperar por el pastor, ¡hay alguien mejor que el pastor! ¡El Espíritu Santo! ¡Pregúntale a Dios! Dentro del corazón, Dios habla. Cuando el alma está ligada al espíritu, tú escuchas la voz de un gato, y te parece que es Dios, escuchas la voz de tu alma o del mismo diablo y te parece que es Dios. He visto personas frustradas porque se han jugado porque escucharon una voz que creyeron que era de Dios y no era de Dios. Pero la palabra de Dios es viva y eficaz y más cortante que toda espada de doble filo y penetra hasta partir el alma y el espíritu. Lo que es del alma es del hombre y lo que es del espíritu es de Dios. No confundas la voz de tu corazón con la voz de Dios, tu comunión con Dios hará que tú conozcas la voz de Dios. El Espíritu Santo que él ha hecho habitar en nosotros no es para que andemos “tanteando” sino que nos guiará a toda verdad y nos enseñará las cosas que han de suceder.

 CONCLUSIÓN

Recuerda: Dios no le puede hablar a alguien que está demasiado ocupado y afanado. Su plan es que oigas su voz dentro de tu corazón. Él quiere que conozcas su voz, tiene anhelos de comunicarse contigo. ¿Sabes por qué Dios nos puso ojos? ¡Porque él tiene ojos! Dios te hizo a su imagen y semejanza para que puedas hablar con él y él pueda hablar contigo. La naturaleza de Dios es una naturaleza de comunicación, él se comunica por su palabra, enseña por su palabra y envía su verdad por su palabra.

Si hasta ahora has vivido lejos de Dios, hoy es el momento de encontrarle y recibirle en tu corazón. Haz esta oración ahora mismo: “Padre querido, perdóname porque he vivido lejos de ti y no te he tenido en cuenta. Hoy te recibo en mi corazón y te pido que lo limpies de todo pecado, de toda iniquidad, de toda maldad. Quiero tener comunión contigo y ser tu amigo, quiero escuchar tu voz. Ayúdame a reconocerla entre tantas voces que todos los días escucho. ¡Gracias Dios! En el nombre de Jesús hago esta oración, amén”.

MENSAJES

MISIÓN

VIDA

PARA LAS NACIONES

Av. 8 de octubre 2335

Montevideo, Uruguay

WhatsApp: (+598) 095 333 330

email: info@misionvida.org

twitter: misionvidauy

facebook: iglesiamisionvida

Diseño: VerakaWeb